Hace unos días, Fidel Kuri Grajales, diputado federal priista y propietario de los Tiburones Rojos del Veracruz, lanzó al aire una advertencia con tono de amenaza para la afición de los escualos: "Si no gana Héctor Yunes (la elección para gobernador), el equipo corre el riesgo de que se vaya del Puerto", dijo ante los medios.
Después de un par de días de los sufragios, y al parecer, desfavorecido en las urnas, la incertidumbre reina con los escualos; sin embargo, Enrique Bonilla, presidente de la Liga Mx, minimizó las palabras del político, a quien desconoció como propietario de los Tiburones; para el mandatario del organismo, Fidel Kuri Mustieles, el hijo de Kuri Grajales, es la única autoridad con los del Puerto.
"Fidel Kuri Grajales está sancionado por la Federación Mexicana de Futbol, para nosotros el único titular de Veracruz es Fidel Kuri Mustieles, nada más. Lo que él diga, no es propio de nuestro análisis, no se le da seguimiento", reveló Bonilla en la Reunión Anual del futbol mexicano, en Cancún.
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