Queens Park Rangers dijo que aceptó un cargo de mala conducta por no haber podido controlar a sus jugadores durante un encuentro de la Liga Premier contra Manchester City.
Varios jugadores del QPR rodearon al árbitro Mike Dean para cuestionar su decisión de anular un gol de Charlie Austin. El arquero del City, Joe Hart, sacó desde su área y la pelota llegó a los pies de Austin, que anotó. Pero el árbitro, que en la jugada anterior había anulado otro gol del mismo Austin por posición adelantada, volvió a anular el tanto por considerar que Hart tocó con el pie izquierdo el balón antes de sacar con el pie derecho, dos toques que según su criterio le obligaron a repetir el saque de arco.
Después del encuentro el técnico de QPR, Harry Redknapp, consideró "un poco excesivo" anular el gol, pero que "si esa es la regla, pues entonces así es".
El club fue multado en 20.000 libras por la Asociación del Fútbol.
El partido terminó 2-2.
