Este fin de semana Óscar Valdez pondrá fin a once meses sin subirse a un ring y el sentimiento asegura es enorme.
“Dos meses con la boca totalmente cerrada fue algo de lo más duro que me ha tocado vivir, pero ahora estoy listo para regresar y eso me pone muy contento. Poder mostrar esta nueva versión”, declaró hoy a La Afición en la última conferencia de prensa previo al duelo que sostendrá ante el italiano Carmine Tommasone para defender el título mundial pluma de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) que mantiene desde hace dos años.
Valdez Fierro, quien regresa al cuadrilátero de la mano de Eddy Reynoso, aseguró sentir un alivio de estar tan cerca de subir al ring luego de cinco meses de trabajo en el gimnasio.
“Esta pelea será una muy buena forma de poner a prueba lo que hemos aprendido en el gimnasio y sobre todo mostrar que además de saber fajarme puedo ser mucho más defensivo sin perder lo emocionante”, declaró el sonorense, quien llega a la cita a exponer también su calidad de invicto en 24 peleas, 19 de ellas por la vía corta.
La clave es la disciplina
Eddy Reynoso, quien lleva 5 meses trabajando con Valdez Fierro, destacó el compromiso que tiene el peleador mexicano y aseguró que esa actitud lo ha llevado a adaptarse mucho mejor a los cambios.
“Cambiar a un peleador, mover cosas de su estilo es algo arriesgado, pues muchos cuando suben al ring olvidan lo que practicaron y regresan a lo que eran, pero Óscar tiene mucha disposición y es un chico muy talentoso”, declaró a La Afición el entrenador tapatío.
Sin embargo, Reynoso aseguró que el cambio en el estilo a afinar mucho más la defensiva será gradual, pero espera que el trabajo del gimnasio se vea reflejado al menos en un 50 por ciento.
“Carmine Tommasone es un peleador olímpico y eso lo hace un rival de riesgo, pero tiene el estilo ideal para que Óscar muestre un poco de lo que está cambiando en su forma de pelear”, declaró Reynoso.
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