La noche del sábado en Escocia, el campeón local Josh Taylor retuvo la calidad de campeón al imponerse por polémica decisión dividida al inglés Jack Caterrall.
El escocés fue beneficiado por los jueces con una decisión dividida con tarjetas de por 113-112 para Caterall, 114-111 y 113-112 para Taylor, a pesar de que tuvo serias complicaciones para poder sobrellevar el castigo que le infringió su retador obligatorio.
Todo estaba puesto para que Taylor se luciese ante su público, pero una mejor estrategia de su rival lo llevó a aguas profundas causando serios conflictos en el monarca, quien fuera de distancia y ritmo tuvo momentos muy complicados arriba del ring.
"Claro que gané al 100 por ciento, lo conecté con mis golpes de poder. Tenia mucha presión, no fue mi mejor. Lo agarré una y otra vez. Me puse mucha presión, ser el gran favorito, estar en casa, tener un gran show, pero no importó al final, obtuve el resultado" , declaró Taylor, quien aseguró que posiblemente abandonará la división en la que ya no se siente tan cómodo y buscará probar suerte en los welters.
Taylor visitó la lona en el octavo asalto y aunque recompuso el camino en el décimo round ya fue demasiado tarde. Pues Catterall seguro de la victoria se las ingenió para seguir maniatando el resto de la contienda al campeón que no lució para nada a lo que mostró en mayo pasado ante José Carlos Ramírez, cuando le arrebató el invicto y los dos títulos mundiales.
Catterall a pesar de haber sufrido su primera derrota profesional, se llevó los aplausos y reconocimientos de los fanáticos. Mientras que Taylor puso un gran asterisco en su carrera.
SFRM
