En el barrio de la Sagrada Familia, en el corazón de Guadalajara, ha brotado un nuevo espacio escénico, regado con amorosa mano y con una vocación social integradora. Nace enfrente (literalmente) de un proyecto hermano que se llama Centro Centro, que se dedica al “diseño y construcción de ideas” escénicas. Ambos son liderados por Luis Manuel Aguilar, conocido por el gremio teatral nacional como Mosco, uno de los directores y diseñadores escénicos más socorridos igual por teatros independientes que por el Palacio de Bellas Artes para una ópera.
Centro Centro produce escenografías, vestuario, máscaras, utilería y mecanismos escénicos. Es un taller y laboratorio de “ingenios” muy particular y lleno de genialidad. Y a pesar de ser una propiedad grande, muy pronto quedó chica al Mosco, que halló en la acera de enfrente de la misma calle de Eulogio Parra una vieja casona que le podía servir como salón de “ensayos”. La seducción entre espacio-creadores fue inmediata y ahora lo han convertido en un foro escénico para poco más de medio centenar de espectadores, con una cafetería que es, además, tienda de artesanías y galería de talentos jaliscienses. Y no contento, va a abrir una librería especializada en artes escénicas.
El foro ha sido bautizado como Sísifo, Teatro de la Sagrada Terquedad, y ya está dando funciones de teatro y conciertos de jazz, procurando activar al vecindario, convidarlo de a poco, persuadirlo para apropiarse y hacer suyo este sitio de cultura. La intención de los artistas que lo comandan es que se entienda como un teatro de barrio, y por ello los trabajos que se programen intentarán cazar al público infantil y juvenil en una estrategia que permita lograr pertenencia y noción de patrimonio por parte de los vecinos. Parece prometedor, pero la chamba de construcción de públicos apenas comienza en este joven y crucial proyecto tapatío que seguramente verán con buenos ojos Cultura UDG y las secretarías de Cultura estatal y municipal. Este tipo de aventuras requiere de muchos amigos y cómplices para no desfallecer.
El Mosco ha pisado decenas de escenarios. Realizó estudios de actuación y diseño industrial en la Universidad de Guadalajara, formó parte de la compañía de teatro de esa casa de estudios y fue alumno de los maestros Rafael Sandoval, Jorge Ángeles, Carlos Converso y José Caballero. Estudió escenografía e iluminación con Philippe Amand y Jorge Ferro, y vestuario con Edyta Rzewuska. Como director de escena recordamos el éxito de Viaje de tres, de Jorge Fábregas, recientemente galardonado como mejor montaje de los Estados por la ACPT. Larga vida a tanta terquedad.