El Instituto Nacional de Cancerología (Incan) inauguró el secuenciador de tercera generación, equipo de alta tecnología recién adquirido, con el con el cual se podrán detectar características moleculares que permitan determinar las terapias para pacientes con cáncer que no responden a ciertos tratamientos, informó el jefe del Laboratorio de Genómica Funcional del Cáncer, Carlos Pérez Plasencia.
Detalló que en general 50 por ciento de los pacientes diagnosticados con neoplasias no responden al tratamiento, por ello “conocer esta información molecular va a permitir a los oncólogos desarrollar nuevas estrategias que mejoren los resultados clínicos de aquellos pacientes que no lo van a hacer adecuadamente al tratamiento convencional”, toda vez que si bien una sola patología puede ser histológicamente igual a escala molecular es completamente diferente.
“Lo más importante que nosotros estamos haciendo es identificar pacientes en riesgo,” uno de los objetivos de la medicina personalizada, dijo.
Pérez Plasencia detalló que el problema de los equipos anteriores de secuenciación masiva generaba una alta tasa de errores, pero “este equipo tiene una de las mejores correcciones y prácticamente cero por ciento de error”, incluso el genoma completo de una persona se puede conocer en tres días.
Para hacer los estudios se realizarán protocolos estrictos, “es como si tuviera un cohete, no lo voy a echar a andar cuanto tenga pequeñas distancias”, para ello se cuenta con otros secuenciadores masivos con los cuales a la fecha se han analizado a 300 pacientes mexicanos, algunos de ellos como portadores de mutaciones que los va a predisponer al cáncer de mama.
Destacó que este trabajo se logró en colaboración con el Instituto Jalisciense de Cancerología así como con el Incan.
