Las circunstancias de la vida y una nueva coproducción binacional me han traído hasta el sauna vegetal y frondoso de Valledupar, en el departamento de Cesar, Colombia. Tierra del vallenato y de Omar Geles, que acaba de morir tempranamente trazándonos “los caminos de la vida”. Uno de los grupos más poderosos del teatro latinoamericano tiene una sala independiente en el centro de esta capital: Maderos Teatro. A esta bella institución la encabeza el director de escena Deiler Díaz Arzuaga. que no dudo en calificar como uno de los directores más dotados que conozco de la generación de los 70-80 del siglo pasado en nuestros territorios americanos.
El maestro Deiler es de esos directores que apuestan permanentemente por investigar la lengua de la teatralidad construyendo metáforas, transformando signos, redefiniendo convenciones y mezclando las técnicas más diversas actorales, clownescas, de teatro corporal, títeres y objetos. No se traga el rete realismo (sic) que tanto ha capado la imaginación de los directores en México, por ejemplo, donde el objeto, la cosa, solo es lo que es. Para Deiler y sus Maderos Teatro la cosa es lo que es y 20 cosas más. Los objetos siempre terminan usándose de otra manera y resignificándose a punta de convenciones sorprendentes y maravillosas. ¡Coño, sí que parlan el teatro de verdad!
Clarisa Cuadros, Carolina Rodríguez, Rafael Moreno y Nolberto Campos encarnan en Retablillo un homenaje a García Lorca que incluye narrativa, poesía y teatro del poeta de Fuente Vaqueros. Retazos que hilvanan estos hijos de Valledupar a partir de una economía de medios estupenda que parte de un pequeño tablado en redondel de dos metros de diámetro. Con música de Jorge Ferreira, el director se apropia del poeta español y no duda en meterle un toque caribeño e irreverente espléndido junto con sus portentosos actores que son instrumentos perfectamente afinados, en donde cuerpo, voz, gestual, canto, manejo de máscaras o marionetas son ya parte natural de su andar. Como dice el propio Deiler, tiene un equipo afila’ito.
Traspunte
Herederos revolucionados
Mucho tenemos que aprender de los procesos del teatro independiente latinoamericano que ya no es aquel legendario de la Creación Colectiva. Estos son sus herederos revolucionados. Ojalá los tengamos pronto por México. ¡Larga vida a Maderos Teatro!