Halla INAH restos óseos en tumba en Zacatecas

Tras emprender un rescate arqueológico, investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) hallaron restos óseos de 28 individuos en una tumba de tiro de Valparaíso, en el sur de Zacatecas.El equipo de arqueólogos, coordinado por Laura Solar Valverde, descubrió en 2009 el contenido de la cámara que, a diferencia de otros registros de tumbas de tiro en ese lugar, permaneció inalterado por al menos mil 600 años.A través de un comunicado, el INAH informó que los arrastres de tierra que ingresaron con el paso de los siglos al interior de la cámara funeraria dificultaron el rescate arqueológico, que se prolongó por 20 días.Las osamentas son, en su mayoría, de individuos adultos, aunque se identificaron tentativamente dos adolescentes y ocho infantes.Al dar a conocer estos hallazgos, en abril durante la primera Jornada Académica "Experiencias en torno al patrimonio cultural zacatecano", se detalló que la disposición de la mayor parte de los huesos refiere que los muertos fueron colocados de manera extendida sobre su espalda.De hecho, algunos con los brazos a los costados o flexionados sobre el pecho, con la cabeza orientada a la entrada de la cámara donde todavía se conserva un escalón que servía de preámbulo a la cavidad hecha en el tepetate. Se trata de un patrón conocido para las tumbas de tiro del centro de Jalisco.Entre los objetos que más llamaron la atención de los investigadores están dos pares de arillos de átlatl (lanzadardos), que guardaban relación con dos individuos y, en un caso, todavía se encontraban asociados a los huesos de la mano.Estas agarraderas elaboradas en concha corresponden con la idea que tenía la gente de este desarrollo, sobre una serie de batallas que se libraban después de morir, de ahí que algunos de los difuntos eran armados con un carácter ritual.Otro aspecto interesante fue que sobre las osamentas dispuestas de manera extendida, estaba el entierro de un personaje que fue acomodado en posición fetal dentro de un fardo. Lo anterior, evidencia que al menos hubo dos momentos de actividad dentro de la cámara."Desconocemos si los otros individuos (los 27 restantes que se hallaron en decúbito dorsal) fueron colocados de manera simultánea."Existe la discusión en torno a si las tumbas de tiro contienen los restos de personas sacrificadas o que fallecieron en un evento simultáneo, o bien, si son inhumaciones consecutivas de personas emparentadas o de personajes con un cargo sociopolítico similar", expuso la investigadora del Centro INAH Zacatecas.Se informó, además, que fueron recuperadas dos puntas de proyectil de sílex, así como un punzón y un fragmento de aguja elaborados con hueso.De igual manera, se detectaron vestigios de decoración pseudo-cloisonné; la evidencia corresponde a pigmentos, ya que el soporte (de material orgánico) desapareció con el tiempo.Finalmente,Laura Solar sostuvo que todos estos elementos señalan que en el sur deZacatecas, en los albores de esta era -durante los primeros desarrollos agrícolas y aldeanos-, se compartieron rasgos culturales con el área del Occidentey hubo una extensa red de intercambio con la costa del Pacífico.