"Un lugar de tránsito lo convierte mi padre en un monumento increíble; lo que hay que celebrar es que haya habido una mano capaz de dar esas pinceladas. La figura que llaman de fuego no tiene nada que ver con fuego, tiene que ver con el universo dialécticamente y es que la dialéctica es un arma de los socráticos para poder hablar con la inteligencia del universo con datos que tuvieran sentido. Le llamaron inteligencia logos. Quiero que ese tesoro sirva a los jóvenes. Es injusto que les corten la oportunidad con explicaciones inexactas de los murales que pintó mi padre en el Cabañas”. Esta es la principal batalla que enfrenta el hijo del muralista José Clemente Orozco con el Instituto Cultural Cabañas (ICC) y la Secretaría de Cultura de Jalisco (SC).
Su petición de que el inmueble patrimonial no cobre el ingreso a los visitantes para que los murales que José Clemente Orozco pintó entre 1936 y 1939 en el interior de la capilla principal nunca la ha visto lograda, tampoco ha estado satisfecho con la promoción que se hace de la obra de su padre, dice que no ha sido suficiente y sobre todo, que las autoridades no le han dado el trato como titular de los derechos de autor de obras representativas del ilustre zapotlense. Orozco Valladares señala que por esas razones intensificará su reclamo por la vía legal.
Su abogado Iván Corral cuenta que se acercaron al ICC “a ver si había un arreglo en cuanto que aceptaran las guías de Don Clemente, para que fueran lo que informara el personal del recinto y más. Lo que el señor tiene son los derechos de autor de los murales de la cúpula y otros tres más de los más representativos. Al momento de hablar con la directora (Olga Ramírez) ella se escudaba con que en su momento a Clemente Orozco le pagaron, porque en los años 30 cuando realizó la obra, ella argumenta que se le pagó por esa obra y por lo tanto la obra pertenece al Cabañas y al gobierno del estado pero no lo puede acreditar porque nosotros tenemos los derechos de autor”.
El especialista narra que el pasado 1 de diciembre ya se realizó una inspección con apoyo del área administrativa del ICC, que sirve como antesala de un registro consistente y que la situación los está obligando a avanzar por la vía jurídica. “Hoy contamos con el acuerdo del juzgado para realizar la inspección, que ya ser realizó, pero el próximo año ya vamos a ir a juicio definitivo”, señaló.