Uno de los templos novohispanos más importante del Valle de México es el ex Convento de San Nicolás Tolentino en Actopan.
Fundado en 1546 por la orden de los agustinos bajo la dirección de fray Andrés de Mata, se trata del recinto católico con mayor acervo cultural e histórico de la región central del país.
Sus características son únicas. Su portada es de estilo plateresco y su claustro combina los estilos gótico y renacentista.

En la parte superior alberga el museo de arte religioso en el cual se conservan esculturas y pinturas de caballete de los siglos XVI al XIX, que representan diversos santos, ángeles, escenas bíblicas y advocaciones de María. Elaborados con técnicas como estofado en madera, pasta de caña de maíz y óleo sobre tela.
Uno de los mayores atractivos del conjunto es la capilla abierta que tiene bóveda de medio cañón y un claro de 17 metros de altura, su interior se encuentra decorado con pintura mural de marcado sincretismo religioso con escenas del Génesis y el Juicio Final.
Desde 2014 comenzó un proyecto de rehabilitación del ex Convento de San Nicolás Tolentino en Actopan, Hidalgo, que emprende el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en el que se contempla la creación de un museo y un centro de documentación regional en el inmueble del siglo XVI.
En 2012 se realizó un estudio estructural del recinto y se analizaron los elementos cuya intervención era prioritaria. El año pasado, la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos elaboró el proyecto para intervenir las caballerizas, el deambulatorio, la galería Aurelio Tovar, el corredor de estudios, el taller de restauración, el palomar y la cornisa del claustro alto.
La primera etapa consistió en la intervención de tres áreas, el cambio de los andamios de la viguería para reparar los techos que también se impermeabilizaron y se restauraron, se reforzaron muros y se adecuaron los sistemas eléctrico y digital.
Los sitios habilitados se localizan en la parte posterior del ex convento, los cuales corrían el riesgo de colapsarse, además de tener filtraciones y humedad, por lo que permanecían cerrados al público. La restauración permitirá ampliar las visitas al interior.
Los lineamientos de las futuras fases de intervención, que se desarrollarán a lo largo de cuatro o cinco años, los definirán las coordinaciones nacionales de Monumentos Históricos y de Obras del INAH, que también supervisaron la primera parte del proyecto.
Tras la pandemia, se inició la restauración del resto de la parte superior del inmueble para evitar su deterioro, plan que se analiza en conjunto con las coordinaciones mencionadas. Será necesario acondicionar algunas celdas y enfocarse en la parte estructural para reforzar el techo y las nervaduras del patio interno.
Ahí se inicia también la restauración de la pintura mural del ex convento agustino y de la capilla abierta, uno de los ejemplos más importantes que hay en toda América en donde se habilitó el atrio para ampliar el espacio, lo que permitirá al visitante ver la capilla abierta.
Por otra parte, se contempla la restauración de las pinturas de la bóveda y la parte interna de la cúpula de la iglesia, trabajos conjuntos que realizarán el municipio de Actopan, el consejo ciudadano local y el Centro INAH Hidalgo, a cargo del restaurador Gabriel Rivera y con recursos locales.
El programa integral de rehabilitación es una obra a largo plazo, que no implicará el cierre del ex Convento de San Nicolás Tolentino, a excepción de las áreas en restauración.