El daño al lienzo de la Virgen de Guadalupe, ocurrido el lunes en Salinas Victoria, no sólo es una afrenta al patrimonio de arte sacro para Nuevo León pues afecta “al corazón” de los habitantes de la región.
Así evalúa tal acto el padre Raúl Mena Seifert, titular de la Comisión de Bienes Culturales de la Arquidiócesis de Monterrey, quien visitó el templo de la Virgen de Guadalupe en Salinas Victoria al ser notificado del daño.
Refirió que la Arquidiócesis tiene detectada a la obra como de “suma importancia”, por lo que se actuó lo más pronto posible para interponer las demandas correspondientes al enterarse del suceso.
“De inmediato se tomaron medidas legales, tanto por parte del INAH como del propio padre responsable del templo, pues se trata de un daño muy importante para los bienes de la nación”, mencionó padre Raúl Mena Seifert.
Se trata de un lienzo realizado por el pintor Miguel Cabrera en 1753, quien era uno de los artistas mexicanos más relevantes de la época. La obra, a decir del padre Mena, fue pedida expresamente para la comunidad del Valle de las Salinas, pues en el siglo XVIII vivía una bonanza económica.
Por petición del arzobispo Rogelio Cabrera López se decidió que la pieza no se mueve del altar del templo, con la finalidad de que el pueblo se entere del daño ocurrido aunado a que la fiesta a la Virgen de Guadalupe está próxima.
Una propuesta emanada desde la Arquidiócesis es que los trabajos de restauración al lienzo se realicen en Salinas Victoria, para que la comunidad tenga conocimiento del proceso.
“Al ser una pieza tan sensible es difícil su movimiento. Además sirve para que la población esté al pendiente de lo que está sucediendo”, opinó.
Raúl Mena, autor del libro "La Catedral Metropolitana de Monterrey: Historia, Arte, Arquitectura, editado por la Universidad de Monterrey", apuntó que la obra tiene un valor “excepcional”.
“Se trata de una obra con valor excepcional por el nombre de quien la pintó y sui antigüedad. La riqueza de la Arquidiócesis está en el centro de Monterrey en sus pueblos, en esta ocasión se tocó la fibra de los pueblos”, mencionó.
Irremediablemente se analizan alternativas para la protección de la pieza a futuro, una vez que se termine su restauración. Sin embargo, la obra debe seguir en exhibición pues “representa mucho para la comunidad de Salinas”, mencionó el padre.
El lunes pasado, una persona no identificada entró al templo de Nuestra Señora de Guadalupe, en Salinas Victoria. Según testimonios, el hombre estuvo sentado en una de las bancas por un tiempo y, al levantarse sacó una piedra de uno de sus bolsillos y la arrojó hacia la pintura.
Este acto ocasionó que se rompiera el cristal de protección y, por consiguiente, se perforara el lienzo de la obra.