La tarde del martes 29 de julio se registró una situación de emergencia en el transporte público de León que rápidamente se difundió en redes sociales. Según los reportes oficiales, tres personas requirieron atención médica tras el derrame de amoníaco al interior de una unidad del sistema Oruga.
El incidente ocurrió cerca de las 2:00 de la tarde en la base de transferencia Delta, ubicada sobre el bulevar Delta y la esquina con Vía Campos Otoñales, en la colonia San Martín. La sustancia se derramó en un camión articulado verde de la Línea 4 de Optibús, identificado con el número económico LE-046.
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Gracias a un reporte al servicio de emergencias 9-1-1, personal de emergencias de Protección Civil y Bomberos arribaron hasta el lugar de los hechos para mitigar los riesgos del derrame del ácido al interior de la unidad, en la que al menos viajaban 50 personas.
Tras bajar a los usuarios del transporte público, únicamente se atendieron a tres mujeres de alrededor de 50 años, identificadas como Marta, Alejandra y Benita quienes recibieron valoración médica luego de haber inhalado el ácido, más tarde se reportaron en código verde (fuera de peligro).
De acuerdo con información que circula en redes una persona llevaba en una botella el “amoníaco” en una bolsa de plástico. Luego de un movimiento, la botella en el que iba el químico, cayó accidentalmente, ocasionando de inmediato la alarma entre los usuarios.
Riesgos de transportar sustancias químicas en transporte público
El transporte de sustancias químicas como el amoníaco representa un riesgo significativo para la salud y la seguridad de los pasajeros y operadores del transporte público. Incluso en pequeñas cantidades, un derrame puede generar afectaciones inmediatas como:
- Irritación de ojos, nariz y garganta
- Dificultad para respirar y sensación de ahogo
- Dolor de cabeza y mareos
- En casos graves, puede provocar quemaduras en vías respiratorias o intoxicación severa
El amoniaco es un compuesto altamente volátil y corrosivo, por lo que inhalarlo en espacios cerrados como un autobús puede causar daños en cuestión de segundos.
Según Protección Civil, transportar este tipo de sustancias en botellas o bolsas improvisadas aumenta el riesgo de accidentes. Las fugas o derrames accidentales pueden poner en riesgo a decena
