En una mesa de diálogo con la Subsecretaría de Educación Media Superior y Superior, alumnos de la Universidad Politécnica de Tulancingo (UPT) demandaron el cese de tres trabajadores de la institución por presuntos casos de acoso y hostigamiento.
Esto, tras la expulsión de Manuel Martínez, alumno de Comercio Exterior y Aduanas, quien agredió a golpes a un maestro, presuntamente cansado del acoso y bullying del que era víctima por parte del docente.
Trabajadores señalados por los estudiantes
Entre los señalados se encuentra el trabajador administrativo Ángel Ramírez Montiel, quien fue habilitado como docente y resultó ser la persona agredida. Los alumnos lo acusaron de acoso sexual, actitud déspota y autoritaria, comentarios sarcásticos, poner apodos, acercamientos físicos no solicitados e intimidación por su posición dentro de la institución.
También señalaron a Francisco Flores García, quien —según los estudiantes— ha sido objeto de múltiples señalamientos por acoso en diversos periodos, así como por presunto fraude.
Finalmente, acusaron a la coordinadora Nadia Padilla Tapia de abuso de poder, gritos, intimidación y conductas denigrantes tanto hacia estudiantes como hacia personal administrativo.
Actividades continúan en la UPT pese a protestas
El secretario de Educación de Hidalgo, Natividad Castrejón, reconoció que se han recibido quejas verbales por parte de alumnos, pero aclaró que no existe documentación formal al respecto, por lo que el caso será revisado.
Agregó que el conflicto no ha paralizado las actividades en la institución, ya que se mantienen las clases de forma regular. Detalló que de los 2 mil 700 alumnos que conforman la matrícula de la UPT, sólo se manifestaron 20 estudiantes y algunos familiares, por lo que pidió dar la debida proporción al conflicto.