El retinoblastoma es un cáncer de primera infancia, pues se presenta en recién nacidos y en infantes de hasta cinco años de edad; por eso es importante detectarlo a tiempo, antes de que avance.
El retinoblastoma es un tumor que afecta la retina, encargada de enviar las imágenes al cerebro; y entre sus síntomas están que la pupila puede verse distorsionada y blanca (o con manchas blancas), especialmente al contrastarla con una luz intensa, y también pueden presentarse problemas de la vista como estrabismo, visión doble o deficiente, ojos desalineados, rojos o con dolor, y que el iris del ojo afectado puede ser de diferente color al del otro ojo.
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Cuando es hereditario hay más probabilidades de que se presente en una edad temprana y en ambos ojos. Cuando no está presente el factor genético, se le conoce como retinoblastoma unilateral porque se presenta en un sólo ojo
El mayor riesgo del retinoblastoma es que no sea atendido a tiempo y el cáncer se extienda a otros órganos del cuerpo, por eso, en algunos casos, el doctor decide remover el ojo afectado y no correr riesgos. Si los tumores son pequeños, el oncólogo puede optar por tratamientos menos invasivos.
Si en la familia ya se han presentado casos de retinoblastoma, es importante acudir con el médico para revisiones periódicas, recuerda que este cáncer tiene un factor genético.
AG