La Real Federación Española de Futbol inició una investigación tras los incidentes en Gran Canaria durante un partido femenil, suspendido en el minuto 84, después de una multitudinaria pelea entre jugadoras de UD Las Coloradas y CF Las Majoreras en el estadio López Socas, duelo correspondiente al grupo VI de la Segunda División (categoría nacional); sin embargo, no es competencia de la RFEF en materia disciplinaria.
La trifulca se originó cuando se marcó un penal en contra del equipo visitante (Las Majoreras) e intervinieron en la pelea al menos quince jugadoras de ambos cuadros, así como público que saltó al campo, según apuntó la árbitro Zelene Herrera, en declaraciones para el diario local 'La Provincia'.
La pena máxima no se cobró, ya que el partido se suspendió con empate a cero tras el altercado, y ahora será el departamento de Competición de la federación nacional el que estudiará lo ocurrido y decidirá sobre las posibles sanciones.
La silbante Zelene Herrera, quien precisó que ella no fue agredida, solo expulsó a cuatro jugadoras (dos de cada equipo).
Con información de EFE y ABC Deportes
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