Ciudad de México /
La sorpresa fue mayor. Nadie esperaba que el presidente Enrique Peña Nieto mandara al congreso una propuesta para prevenir la discriminación contra las personas LGTBI que ciertamente incluye varios cambios de importancia a la Constitución y el Código Civil Federal, el más mencionado de los cuales es, sin embargo, el reconocimiento explícito en todo el país al llamado matrimonio igualitario. ¿Qué explica esta decisión notable? ¿Es el símbolo de lo mucho se ha ganado en el país en estos terrenos o, por el contrario, apenas el primer paso en un camino todavía larguísimo? ¿Qué apoyos y qué oposiciones encontrará la propuesta? ¿Es suficiente?