Ciudad de México /
Nos esmeramos en parecernos a las ciudades primermundistas con proyectos como la rueda de la fortuna para que nuestras postales se parezcan a las de Londres o París, pero nunca copiamos de ciudades desarrolladas los proyectos que generan mejor calidad de vida. Esta rueda demuestra claramente como los tomadores de decisión perciben a las reservas naturales, los bosques, los parques y los camellones. Mas que pensar en ellos como una región de protección ambiental a favor de la calidad de vida, los ven como reserva territorial para generar inversión privada.