La Red por los derechos de la Infancia en México (Redim) rechazó la postura del gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, tras la recomendación emitida para él y la titular de la Oficina Amar a Nuevo León, Mariana Rodríguez, respecto a la vulneración de derechos de niños, niñas y adolescentes a cargo del CAI “Capullos”, particularmente de un bebé egresado injustificadamente para permanecer en manos del matrimonio durante un fin de semana.
Redim señaló que en vez de tomar positivamente las recomendaciones basadas en un marco constitucional y de derechos humanos, Samuel García minimizó el respeto a las normas que se le indican, aún en su condición de funcionario público.
“Necesitamos personas funcionarias públicas que entiendan y sean conscientes de que su rol como servidores y servidoras públicas no es la de sostener una visión caritativa de ayuda hacia las infancias, sino la de garantizar el respeto y el cumplimiento de los derechos de la niñez y adolescencia, de acuerdo con los parámetros establecidos en la ley”, remarcó Redim.
El organismo reiteró su preocupación sobre el uso y abuso de su autoridad para emprender campañas, presuntamente en beneficio de la niñez, pues esto sólo ha revictimizado a las infancias en condiciones de vulnerabilidad como sucedió en el caso del bebé del DIF.
“Esperamos que después del estándar de protección que marca esta recomendación, sea la última vez que suceda”, añadió la sociedad civil, toda vez que se pronunció para permanecer al tanto de que las medidas de reparación del daño se cumplan.
Asimismo, llamaron a todas las autoridades a comprender que los menores no deben ser vistas como beneficiarias de obras generosas o caritativas, pues “es esta mirada precisamente la que mantiene en abandono institucional a las infancias que están bajo el cuidado del Estado. Niñas, niños y adolescentes son personas sujetas de derecho que los Estados tienen la obligación de proteger y garantizar”.
Enfatizamos que las personas servidoras públicas deben actuar a la altura de su deber constitucional que conlleva ser garantes de los derechos de la niñez. Por ello, les exhortamos a aceptar la recomendación de la CEDHNL en un sentido amplio y fortalecer, a su vez, su quehacer con un enfoque de derechos humanos y no asistencial o caritativo. Asimismo, extendemos nuestro apoyo técnico que permita la promoción y garantía de los derechos de niñas, niños y adolescentes, en especial, para quienes se encuentran en albergues administrados por el Estado.
FMU