Luego de que a finales del 2024 las autoridades municipales de Tultitlán cambiaran el nombre a la colonia Fimesa y sus secciones, por el de “Cuarta Transformación”, además de renombrar calles con lemas del gobierno federal del sexenio de López Obrador, generando una gran controversia entre la comunidad cuyos habitantes se inconformaron e interpusieron un amparo para revocar la decisión, la abogada de los residentes de la colonia Fimesa, Irlanda Fuentes, reiteró que hay 93 carpetas de investigación iniciadas ante la FGJEM en contra de funcionarios y ex funcionarios públicos de Tultitlán, y se encuentran debidamente integradas.
“Con una sola que se judicialice entonces se haría justicia a los habitantes de la colonia Fimesa en sus secciones 1, 2 y 3” señaló la abogada Irlanda Fuentes.
Explicó que, si la Fiscalía de la entidad mexiquense procede, “sería un logro y por fin obtendrían justicia los habitantes”. Pidió a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México que pongan a trabajar al área de combate a la corrupción y que se ejerza acción penal en contra de la ex presidenta del periodo anterior y trabajadores del ayuntamiento.

A decir de la abogada, las víctimas, es decir los colonos de las Fimesas 1, 2 y 3, cuentan con todos los datos de prueba “idóneos, pertinentes y suficientes”, como para acreditar los abusos de autoridad de los que fueron objeto por parte de la Policía Municipal y Trabajadores del Ayuntamiento de Tultitlán.
Añade que cuentan con pruebas de que “se desviaron recursos municipales para realizar una compra de terrenos no escriturados y los cuales ya tienen un propietario que son los vecinos, a algunos de los cuales se les despojó de la propiedad. Se simuló una compra de un bien inmueble”.
En realidad, el conflicto con los vecinos de Fimesa en Tultitlán inició desde 2023, cuando a través de diversos mecanismos legaloides, autoridades locales despojaron a unas 30 familias de sus propiedades, adquiridas a ejidatarios con títulos de propiedad agrarios.
Posteriormente cercaron terrenos que se adjudicaron como propiedad municipal, a pesar de que se demostró la propiedad de los poseedores, y además por si eso fuera poco destruyeron 32 casas construidas formalmente, algunas de dos o tres niveles.
Y lo que ha sido para los vecinos lo peor, agregó la representante legal, es el cambio de nombre de la colonia a Cuarta Transformación, sin la existencia de un plebiscito, foro o consulta que avalara la nominación impuesta por las autoridades.

HCM