De las 42.1 millones de toneladas de residuos valorizables como plástico, cartón, papel o aluminio que se generan cada año en México, sólo se recicla el 6.7 por ciento, así que más 39 millones de toneladas van a la basura llegando a contaminar ríos y mares, por lo que la Alianza México sin Plástico y Greenpeace sostienen que la industria del reciclaje no es suficiente y exigen al Senado modificaciones a la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR) a fin de que los fabricantes se hagan responsables de los residuos derivados de sus productos y la prohibición de plásticos de un sólo uso en todo el país, entre otras medidas.
“La Asociación Nacional de Industrias del Plástico dice que reciclan el 20 por ciento del plástico del país, a partir de esto analizamos las tasas reales y encontramos que solo se recicla el 6.7% de 42.1 millones de toneladas de residuos, poco más de 2.5 millones de toneladas”, señaló Miguel Rivas, coordinador de la campaña de Océanos de Greenpeace México.
El estudio Reciclar: la falacia de la industria en la lucha contra la contaminación plástica, elaborado por Greenpeace y la Alianza México sin Plástico, indica que la tasa promedio de recuperación de residuos valorizables es de 1.95 por ciento respecto a su producción, debido la ausencia de centros de acopio y reciclaje, la falta de separación de basura en la mayoría de los estados y el aumento de envases cada vez más difíciles de reciclar por su composición, colores llamativos y el uso de serigrafía.
De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, solamente hay mil 466 centros de acopio que reciclan el 0.03 por ciento de los residuos; además de que existe un enorme numero de centros no registrados que trabajan en la informalidad, que logran recuperar el 4.07 por ciento, lo que suma el 6.07 por ciento promedio en reciclaje a nivel nacional.
Un esfuerzo a destacar es la asociación Ecoce, fundada en 2002 para acopiar y reciclar los envases de la industria refresquera, y que en 2018 logró la recuperación de más de un millón 452 mil toneladas de PET, PEAD, aluminio y vidrio en colaboración con más de 24 millones de personas en todo el país.
Pero aún con esa iniciativa, las cifras son bajas, por lo que Greenpeace, considera que “reciclar es la última de las alternativas de la economía circular, por lo tanto no debe ser la principal solución promovida por la industria”. De ahí que la Alianza México sin Plástico presentó una iniciativa de reformas a la LGPGIR que impulsa la responsabilidad extendida al productor, para obligar a los fabricantes a hacerse cargo de la gestión de los residuos derivados de sus productos, misma que es respaldada por Xóchitl Gálvez y Raúl Paz del PAN, Marybel Villegas y Susana Harp de Morena, Verónica Delgadillo y Samuel García de Movimiento Ciudadano, Verónica Camino y Alejandra Lagunes del Verde, Miguel Ángel Mancera del PRD, Sasil de León del PES y el independiente Emilio Álvarez Icaza.
Pero también existe otra iniciativa, impulsada por el vicepresidente de la Mesa Directiva, Jorge Carlos Ramírez Marín, y el coordinador de Morena, Ricardo Monreal, –que aseguran está alineada a la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y a la Economía Circular de los plásticos promovida por la ONU–, la cual plantea metas de reducción de plásticos y en el que la principal diferencia es que no prevé la responsabilidad extendida al productor, sino la responsabilidad compartida, por lo que Greenpeace acusa que dicha propuesta busca beneficiar a los industriales.
“Al llegar al año 2030 debimos haber reducido sustancialmente la producción de plástico virgen, el plástico de un sólo uso, tener política de rediseño de productos, una política fiscal más agresiva, para fomentar que haya más interés por crear haya industrias recicladores y que reutilicen el plástico, el tema es hacer solución en la que de verdad estemos involucrados todos, la industria, el gobierno y sociedad”, dijo en entrevista con Notivox Jorge Carlos Ramírez, Marín.
Existe una infinidad de envases que no están hechos para ser reciclado, como los envases multicapas, con serigrafía o el PET de colores; Rivas advierte que el reciclaje se ha idealizado, pues solo es posible reciclar hasta cinco veces un material como el PET. Además de que su acopio está sujeto a la oferta y demanda; por ejemplo, por un kilo de aluminio los acopiadores pagan entre 13 y 25 pesos, mientras que por un kilo de PEAD pagan 5 pesos por kilo, y por un kilo de cartón un 1 peso.
RLO