El PRI y sus aliados políticos tuvieron miedo de la ley 3de3, dijo el coordinador de los diputados del PAN, Marko Cortés, a lo que el líder priista en San Lázaro, César Camacho, respondió que el Sistema Nacional Anticorrupción es mucho más robusto que sólo esa ley.
Luego de una sesión de 10 horas y entre cuestionamientos de las bancadas de PAN, PRD, Morena y Movimiento Ciudadano, la Cámara de Diputados aprobó en lo general y en lo particular la llamada ley 3de3 con las modificaciones que realizó el Senado para limitar el carácter público de las declaraciones patrimoniales, fiscales y de intereses.
Marko Cortés, líder de los diputados panistas, dijo que con la aprobación de la ley 3de3 en esos términos, el PRI demostró que no entendió el mensaje de los ciudadanos en las elecciones.
“El PRI no entendió el mensaje del 5 de junio, en donde los ciudadanos quieren que se combata a la corrupción”, dijo en entrevista con Adela Micha en Imagen Radio.
Cortés dijo que "la parte donde le tuvieron miedo el PRI-Verde-Nueva Alianza es en las declaraciones patrimoniales”, por lo que utilizaron su mayoría legislativa para aprobar una ley en la que “no está claro hasta dónde y en qué formato van a ser públicas (…) y con qué nivel de accesibilidad para la población”.
Pese a esto, dijo que “hay grandes puntos en donde en México sí se va a poder combatir la corrupción de a de veras”.
Sobre la obligación para que también empresas y personas físicas presenten su 3de3, dijo que para los legisladores del PAN eso es confuso e inoperante porque ni siquiera son servidores públicos, “los metieron a esa ley, no entendemos la razón”.
César Camacho, coordinador del PRI en San Lázaro, respondió a las críticas por las leyes anticorrupción aprobadas diciendo que “no es un asunto de 3de3, sí es importante, pero centrarlo me parece que no permite la comprensión cabal”.
“Éste es un Sistema (Nacional Anticorrupción) muy complejo, tiene que analizarse para comprenderlo a cabalidad, en forma integral y no con parcialidad”.
Consideró que es injusto que los ciudadanos digan que no se les hizo caso, cuando se aprobaron leyes que permitirán que “al que robe que lo meta en la cárcel”.
