Desde que Emiliano Salas tenía 15 años comentó a sus padres un sueño: llevar al Congreso la iniciativa para retirar la palabra "discapacitados" de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y que se cambiara por el concepto de capacidades diferentes.
En punto de las nueve de la mañana, y a unos días de cumplir 22 años, el sueño de este joven autista se hizo realidad al presentar en la Oficialía de Parte del Congreso del Estado, no sólo una, sino dos iniciativas de reforma.
Daniel Emiliano Salas Hernández nació el 21 de junio de 1994, caminó hasta los tres años, y fue hasta después de los siete cumplidos que logró hablar y escribir.
Y, a pesar de eso, y gracias al trabajo de maestros y psicólogos que lo han apoyado y acompañado, hoy cursa el 5to tetramestre de la carrera de Derecho, y espera ser abogado defensor en un futuro.
Mientras ese tiempo llega, este viernes acudió al Congreso y, antes de participar como invitado en la mesa de trabajo sobre el Espectro Autista, dejó la papelería para pedir al Poder Legislativo dos modificaciones.
En su primera iniciativa, pretende que se reforme el Artículo 1° de la Constitución Mexicana, y que sea retirada la palabra "discapacitados" y se reforme por la palabra o concepto "capacidades diferentes".
Y en la segunda iniciativa, Salas Hernández solicita sea retirado el párrafo VI del Artículo 10° de la Ley General para la Atención y Protección a Personas con la Condición del Espectro Autista.
El párrafo dice: Se reconocen como derechos fundamentales de las personas con condición del espectro autista y/o de sus familias, en los términos de las disposiciones aplicables, los siguientes:
VI. Disponer de su ficha personal en lo que concierne al área médica, psicológica, psiquiátrica y educativa, al igual que de los certificados de habilitación de su condición, al momento en que le sean requeridos por la autoridad competente.
"Considero discriminatorio el que un tercero o una autoridad competente me solicite una carta o certificado de evaluación para demostrar o comprobar que soy autista.
"Ese párrafo me hace sentir discriminado, relegado y me hace sentir como si yo fuera un delincuente que tiene que llevar consigo salvoconducto, lo cual atenta contra mis garantías individuales", compartió el joven estudiante.