La Secretaría de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y la Dimensión Pastoral de las Fuerzas Armadas, se unieron a la celebración del Día de la Marina que se realiza desde 1942.
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“Expresamos nuestra solidaridad con los familiares de todos aquellos marinos y militares que han abrazado generosamente esta vocación y que en el cumplimiento de la misma, han perdido la vida", informó en un comunicado.
En el documento “Los Marinos y Milicia”, el Episcopado pidio que se “les conceda el don de la vida, y para que no se sientan tentados a quebrantar su vocación de servicio a la Patria, a las instituciones, pero sobre todo, a sus hermanos: el pueblo de México, que tanto los necesita.
La iglesia es consciente de que país atraviesa por un periodo de crisis, en el que las organizaciones delictivas han ampliado sus redes y ocasionado la muerte de varios soldados y marinos".
El Episcopado afirmó que los integrantes de las fuerzas armadas son “héroes anónimos” y que están llamados a la santidad desde su vocación porque ejecutan un trabajo extensivo en defensa del país, y porque su vocación militar exige un alto grado de responsabilidad.
La iglesia hizo un llamado a las autoridades a ser sensatos en la ejecución de sus estrategias para la búsqueda de la paz, en favor del clamor de los más pobres y vulnerables y recordaron que el papa Francisco hizo pidió a los integrantes de las Fuerzas Armadas que sean instrumentos de reconciliación.
Con información de Notimex
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