La Revolución cubana fue el acontecimiento cardinal de la historia de América Latina de la segunda mitad del siglo XX. Ningún otro hecho alineó tan meridianamente el espectro político, definió alianzas militares y estrategias continentales (tanto de la izquierda como de la derecha), inspiró programas y orientó inversiones, creó centros de investigación y especialistas en las universidades estadounidenses y abrió espacio a la izquierda en los claustros universitarios del subcontinente, fue referente ineludible de la rebelión juvenil de los sesenta y universalizó lo latinoamericano en un mundo secularmente eurocéntrico.
¡Fidel, Fidel, qué tiene Fidel!
Si la historia absolverá a Fidel Castro está por verse. No sabemos si prevalezca en la memoria colectiva el legado de la Revolución cubana o la inocultable deriva autoritaria que tomó.
Ciudad de México /