Un cocodrilo fue rescatado de morir a causa de la contaminación en la laguna del Carpintero de Tampico.
Autoridades de Ecología realizaban un recorrido por la laguna del Carpintero, como parte del censo que están llevando a cabo y se encontraron con un peculiar caso.
Un pequeño cocodrilo tenía en su cuello un aro de plástico (como los que tienen los envases de algunas bebidas), como si se tratara de un collar.
El paso a seguir fue inmovilizar al joven saurio, le taparon el hocico y le ataron las patas, con la finalidad de evitar riesgo al retirarlo dicho rastro de contaminación de la laguna del Carpintero.

“Si el cocodrilo hubiera tenido ese aro por un año más se hubiera deformado y se hubiera muerto, es lo que señalan los biólogos", dio a conocer el comandante de Bomberos, Juan García.
Posteriormente el cocodrilo fue regresado a su hábitat, y se reintegró a la población, luego de que afortunadamente fue encontrado por las personas que realizan el censo en dicho cuerpo de agua.
En fotografías, documentales y evidencia de especialistas de vida silvestre se han popularizado fotos en donde un pedazo de plástico pueden deformar hasta el duro caparazón de una tortuga.
Mientras tanto el censo de cocodrilos en la laguna del Carpintero sigue en pie, en proceso con la finalidad de conocer la cantidad de saurios y el estado en el que se encuentran.
SJHN