Comunidad

Crean artículos decorativos con grabados en mármol

Utilizan una técnica ya patentada en México y así lo comunican a sus clientes en cada artículo que elaboran, por lo mismo no tienen competencia

Juan Legorreta y su familia, compuesta por su esposa Gabriela y sus hijos Camila y Misael, quienes están por terminar su carrera universitaria, son originarios del estado de Puebla, aunque ya llevan seis meses avecindados acá, en la tierra del Xantolo, el zacahuil y el huapango, particularmente en la capital del estado.

Ellos se dedican a grabar el mármol, actividad que han desarrollado desde hace ya varios años y que ahora trajeron a Hidalgo y que comparten en diferentes formas, tamaños y precios en diferentes exposiciones artesanales y ferias.

“Apenas tenemos medio año viviendo acá en Pachuca, rentamos un departamento y el plan es radicar aquí para dar a conocer en esta zona todo lo que hacemos, pero apenas estamos en el proceso de adaptación y al parecer ha funcionado, así que yo creo que el trabajo lo vamos a promover aquí en Hidalgo con mucho gusto para que nos conozcan mejor”, señala Juan.

En 2024 fueron al Estado de México, a Texcoco, a la Feria del Caballo, y hace dos años estuvieron por primera vez acá, en la de San Francisco, “gracias a Dios nos fue muy bien, al igual que en Tulancingo, entonces, gracias a esa participación y a los resultados obtenidos, pues nos permitió voltear para Hidalgo y desde hace dos años hemos estado participando por acá con muy buenos resultados”.

 
Técnica especial

El mármol se crea cuando ciertas rocas, llamadas calizas, se exponen a altas temperaturas y presiones, lo que las transforma y cristaliza; está compuesto principalmente por carbonato cálcico y otros minerales que le otorgan diversos colores y características, ya que al pulirlo adquiere un brillo natural, y se utiliza en construcción, decoración y escultura.

Juan y su familia han aprendido a grabarlo. Han desarrollado una técnica particular para ello, y la usan para crear artículos decorativos para el hogar que han gustado mucho a la gente.

“Hace tiempo la técnica la usaban para concretar acabados en construcción, como en los escalones para evitar que la gente se resbalara en el mármol, pero fuimos sacando una línea como la que nosotros tenemos hoy y gracias a Dios ha gustado, y nos han invitado al estado de Hidalgo y con todo gusto participamos con ustedes”.

Explican que dicha técnica ha sido ya patentada en México y así lo hacen saber a sus clientes en cada artículo que elaboran: “no hay competencia, al menos no todavía, porque lo implementamos nosotros, porque no existía hasta que lo hicimos”. Dicen que es una técnica muy noble porque les permite grabar fotografías, logotipos y muchas otras cosas que ya dominan muy bien y con la que trabajan para crear artículos decorativos con mármol, como relojes de diversas formas y tamaños (largos, cuadrados, redondos…), cuadros, portallaves y más, piezas que han gustado y “por eso aquí estamos, trabajando fuerte y con toda la actitud y el deseo de que nos vaya bien a todos”.

Entre todos los productos que elaboran no hay uno en particular que tenga mayor demanda porque todo se vende, aunque hay cierta predilección entre la clientela por los portacartas y los portallaves pequeños, pero siguen en un constante proceso de desarrollo de más piezas: “le damos un poco de color a las obras, como una reproducción de Vincent Van Gogh en una repisa, y ha sido muy aceptada acá en Hidalgo y estamos muy contentos por eso. Camila y Misael son los que hacen las pinturas en el mármol, como El Principito, porque se trata sí de producir, pero también de innovar y cada que se nos ocurre hacer algo a cualquiera de los cuatro lo implementamos y lo llevamos a cabo”.

El negocio Juan afirma que los precios de sus artículos son bastante accesibles para que la familia se lleve una pieza nueva al hogar, una artesanía, y de hecho sus creaciones han llegado a Alemania, Japón, España, Sudamérica y, en especial, a Estados Unidos, ya que quienes radican allá y vienen y los ven siempre se llevan una pieza para sus casas como recuerdo. Por ejemplo, los portallaves grandes, en precio de mayoreo, cuestan 200 pesos, al igual que un reloj, mientras que los más pequeños, también en precio de mayoreo, los comercializa en 120 y 90 pesos.

Juan y su familia aman lo que hacen, como debe ser, por eso no duda en enviar un mensaje a quienes buscan emprender: “hay visión y ganas de hacer las cosas porque, todos lo sabemos, en México hay mucho talento, sólo hace falta impulsarlo”.


Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.