Miguel Hidalgo y Costilla tuvo complicado paso por Jalisco durante 1810, a su llegada a finales de noviembre fue recibido en Guadalajara con gran alegría, situación que cambió con los meses luego de la derrota de los insurgentes en la batalla del Puente de Calderón.
El Padre de la Patria llegaría a Guadalajara un 26 de noviembre, tras un banquete en Tlaquepaque, visita la Catedral, donde pronuncia “aquí tienes al hereje” y las siguientes horas la ciudad acompaña la entrada del insurgente con música y teatro.
Miguel Hidalgo despacha del Palacio de Gobierno desde donde emite diversos bandos y disposiciones a su tropa y la región donde se hallaba, incluyendo sobre abolición de la esclavitud.
El 13 de diciembre autorizó el asesinato de europeos en las Barranquitas de Belén. También nombra a un embajador, Pascasio Ortiz de Letona, apoyo de Estados Unidos.
El día 20 se edita el primer número de siete de El despertador americano desde la finca que hoy es el Museo del Periodismo y las Artes Gráficas, primer periódico insurgente, donde se dirige a europeos avecindados en América, criollos y a las tropas realistas.
Ya en enero de 1811, Hidalgo logra imponer su visión de enfrentar a las tropas realistas contra la estrategia de guerra de guerrillas que tenía Allende, para el día 14 los insurgentes avanzan rumbo al Puente de Calderón, donde de 30 mil hombres por la causa insurgente, mil cuatro cientos eran batallones medianamente disciplinados, el resto incluso ni bien armados estaban.
Tras la batalla donde los insurgentes son superados, estos se dispersan y el cura Hidalgo no regresa a Guadalajara y sigue su camino hasta el ahora estado de Aguascalientes, pasando por el río Santiago y Cuquío.
FUENTE: La ruta de Hidalgo de Carlos Herrejón Peredo
https://inehrm.gob.mx/work/models/inehrm/Resource/439/1/images/la%20_ruta.pdf
SRN