A tres meses de su reapertura, negociantes de la calle de las Novias (Pedro Moreno) en el centro de Guadalajara, apenas rescatan al día un 30% de las ventas que percibían antes de la pandemia de coronavirus para pagar sueldos y comprar material de confección.
A decir de Margarita Jiménez, gerente de una tienda de vestidos para nupcias y XV años de la calle Grecia, gran parte de sus clientas son provenientes del interior del estado u otras entidades. “Son pocas las personas que se proponen hacer un evento como este por lo mismo de que económica todos nos fuimos para abajo”, mencionó.
De ellas, 65% busca atuendos y accesorios para quinceañera y el resto son novias. Desde la reactivación económica del 1 de junio, Margarita sólo ha registrado a 60 clientes, cuando anteriormente en este período vendía el triple.
Lo más preocupante de su negocio son sus deudas con el arrendador del local, pues hasta ahora acumula cuatro meses de renta sin pagar, que ascienden a los 100 mil pesos.
“Es lo que nos tiene tensos a todos, hay ocasiones que uno ni duerme porque las rentas no pudimos pagarlas por darle un poco a los que aquí laboran, porque sabemos que tienen que comer y gracias a ellos podemos tener todo ese trabajo”.
De la empresa de Margarita se mantienen 15 empleados y sus respectivas familias, entre costureros, cortadores y bordadores.
Leonardo Gutiérrez, dedicado a la comercialización de ropones para bautizo y vestidos de primera comunión, coincidió en que las ventas en este giro no se han recuperado. Indicó que la gente aún siente temor de realizar celebraciones religiosas debido a la emergencia sanitaria.
“Está subiendo y bajando [la venta], ahorita está algo baja, también la temporada de diciembre es baja y pues la gente tiene miedo a venir, no viene mucha gente”, finalizó.
MC