La cuenca del Alto Atoyac que se ubica en el estado de Puebla registra niveles de alta contaminación y fuera de escala, es decir, por arriba de los criterios establecidos por las autoridades federales.
De acuerdo con los resultados de pruebas de laboratorios que trabajan para las autoridades federales y estatales, la contaminación en la cuenca del Atoyac se mantiene y continuó durante este año 2020 enmarcado por la suspensión de actividades presenciales y comerciales a partir de finales de marzo y hasta el mes de agosto de este año, como medidas para romper la cadena de contagios por coronavirus.
En el río Atoyac, a la altura de la zona ubicada entre San Pedro Cholula y Puebla capital, se detectó contaminación mil 800 por ciento por arriba de la norma para determinar agua limpia; mientras que en el río Alseseca se registró una contaminación de dos mil 300 por ciento superior a la norma.
Los reportes de los laboratorios revelan que en el río San Francisco, que cruza por el centro de la ciudad de Puebla y presenta una parte entubada, la contaminación es mil 800 superior a la norma; al norte de la capital del estado, en la Barranca del Conde, la contaminación es dos mil 900 por ciento mayor a la norma; en el colector Chachapa, en Amozoc, se registró la mayor contaminación, cinco mil por ciento por arriba de la norma; y en la zona de San Martín Texmelucan, es de mil 300 por arriba de la norma.
En el caso del río Atoyac, las pruebas muestran que el agua llega contaminada desde el estado de Tlaxcala; mientras que en la zona de San Martín Texmelucan, donde se ubica la zona industrial Quetzalcóatl, la contaminación aumenta; y su punto más alto se establece a la altura del río Rabanillo, es decir, en la zona de San Pedro Cholula y Puebla capital. Además, en el punto conocido como Echavarría, es decir, cerca de la presa de Valsequillo, la contaminación desciende a 818 por arriba de la norma.
Por otra parte, al norte de la capital de Puebla se ubica uno de los puntos más contaminados de la cuenca del Alto Atoyac, la Barranca del Conde, la cual se encuentra en la zona del Parque Industrial 5 de Mayo y de la Central de Abasto, con contaminación de dos mil 300 por ciento por arriba de la norma.
Los resultados de las pruebas muestran que la zona más contaminada de la cuenca del Atoyac se ubica en la zona de Chachapa, donde el Alseseca recibe las aguas de la región de Amozoc. La contaminación está por arriba de los parámetros de las normas federales y es cinco mil por ciento superior a los máximos permitidos.
Los resultados de los laboratorios muestran que el agua de los ríos Atoyac y Alseseca de la cuenca del Atoyac se encuentran sólidos suspendidos de hasta 345 mg/Litro, cuando la norma establece 48.9 mg/L. Los sólidos suspendidos provocan la formación de nuevos compuestos que pueden llegar a ser tóxicos, ya sea para el ambiente o para los seres vivos que consuman el agua.
Al mismo tiempo, se detecta la presencia de Fierro hasta mil 700 por ciento más a los niveles permitidos. La norma establece un valor de 0.34 mg/L; mientras que los valores promedios encontrados son de 5.92. El fierro es metal que desencadena que el cuerpo del ser humano responda incorrectamente y produzca hormonas en particular.
De forma adicional, en las aguas de los ríos que pasan por la zona metropolitana de Puebla se detectaron coliformes fecales. Los valores permitidos son de mil NMP/100 mililitros; sin embargo, en el Atoyac se detectaron 10 mil 386.07. Las coliformes fecales están presentes en el agua residual y las personas que están expuestas a estas, pueden contraer enfermedades infectocontagiosas como fiebre, infecciones, tifoidea y hepatitis.
Las aguas de la cuenca del Atoyac mostraron que en el rubro “demanda Química de Oxígeno”, el valor permisible es de 93.9 mg/L; sin embargo, en la muestra se detectaron valores de más de 300. La demanda de Química de Oxígeno es causante de enfermedades como gastroenteritis, enteritis, diarrea, fiebre tifoidea, cólera, salmonelosis, disentería bacilar, hepatitis, conjuntivitis, parálisis, meningitis y enfermedades respiratorias.
Dentro del esquema “nitrógeno total”, en el agua de los ríos Atoyac y Alseseca se detectaron índices por encima de la norma. Los nitritos convierten la hemoglobina a metahemoglobina, reduciendo la cantidad de oxígeno que se transporta en la sangre. El resultado es que las células no funcionan adecuadamente en el organismo.
Violan derecho a un ambiente sano: CNDH
Ante la contaminación de los afluentes de la cuenca del Alto Atoyac, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió el 21 de marzo de 2017 la recomendación 10-2017 por “la violación a los derechos humanos a un medio ambiente sano, saneamiento del agua y acceso a la información, en relación con la contaminación de los ríos Atoyac, Xochiac y sus afluentes”, en agravio de quienes habitan y transitan en los municipios de San Martín Texmelucan y Huejotzingo, en el estado de Puebla; y en los municipios de Tepetitla de Lardizábal, Nativitas e Ixtacuixtla de Mariano Matamoros, en el estado de Tlaxcala.
En tanto, un grupo de ciudadanos de la organización Dale la Cara al Atoyac interpuso una demanda de Amparo Indirecto número 303/2017 ante el Juzgado Tercero de Distrito en Materia Administrativa de la Ciudad de México el 07 de marzo de 2017. A través del Juicio de Amparo se reclama la omisión por de las autoridades de los tres niveles de gobierno señaladas como responsables, del ejercicio de sus atribuciones en materia de medio ambiente y aguas, para salvaguardar la Cuenca Hidrológica Río Alto Atoyac.
Entre la problemática detectada que generó la contaminación de la cuenca del Alto Atoyac se encuentra la falta de Cultura del Agua; la falta de recursos financieros en toda la cuenca, para desarrollar infraestructura y acciones de control; y la falta de previsión de inversiones y pagos, para remediar la problemática en las Leyes de Egresos; además, de acuerdo con Dale la Cara al Atoyac, existe una gran cantidad de descargas a cielo abierto y conexiones ocultas y sin permiso de empresas y negocios a los colectores de agua pluvial.
AFM