Lo que comenzó como una reunión familiar en la colonia La Moderna terminó en una escena de horror. Tres personas murieron, entre ellas una mujer que inicialmente había sobrevivido al ataque armado perpetrado la noche del sábado 5 de julio.
La Fiscalía General del Estado confirmó que María, de 58 años, falleció mientras recibía atención médica, sumándose así a la lista de víctimas mortales de esta violenta agresión.

El ataque ocurrió en plena celebración, cuando un grupo de personas convivía en una vivienda de la calle Moroleón.
Un vehículo, hombres armados y una fiesta interrumpida por la violencia
Eran alrededor de las 9:20 de la noche cuando un auto sedán de color azul, con vidrios polarizados, se detuvo frente al domicilio ubicado entre las calles San Luis de la Paz y Purísima.
De él descendieron al menos tres hombres armados, quienes, sin mediar palabra, ingresaron a la vivienda donde se celebraba la fiesta. Dentro del domicilio estaban María, de 58 años; Alicia, de 43, y Ángel, junto con otros familiares.
De acuerdo con testimonios recabados por las autoridades y versiones de los vecinos, los atacantes dispararon directamente contra los asistentes, provocando caos y pánico.
Ángel y Alicia fueron alcanzados por las balas y murieron casi al instante, antes de que los servicios de emergencia llegaran. María, quien había sobrevivido al ataque con heridas graves, fue trasladada por paramédicos a un hospital cercano. Sin embargo, horas más tarde perdió la vida debido a la gravedad de las lesiones.

Sin detenidos y sin claridad en el móvil
Hasta el momento, las autoridades no han brindado información sobre los motivos detrás del ataque ni han reportado la detención de los responsables.
Elementos de la Secretaría de Seguridad, Prevención y Protección Ciudadana desplegaron un operativo en la zona, pero no lograron localizar a los agresores.
La vivienda donde ocurrió la tragedia fue asegurada por agentes de la Fiscalía, quienes realizaron el levantamiento de evidencias para continuar con las investigaciones.
Vecinos del lugar relataron que no era la primera vez que se escuchaban detonaciones en la zona, pero nunca antes con consecuencias tan trágicas.
Muchos vecinos optaron por no salir de sus casas durante el domingo, mientras patrullas y peritos seguían trabajando en el lugar.