El líder de Izquierda Democrática Nacional, René Bejarano, dijo que en 2013 ya se había iniciado un proceso de revocación de mandato al presidente municipal de Iguala, José Luis Abarca por estar presuntamente vinculado con el asesinato de militantes perredistas en ese municipio, pero que los diputados locales integrantes de Nueva Izquierda detuvieron el desafuero.
En mayo de 2013 tres militantes perredistas y miembros de la organización de la Unión Popular (UP) entre ellos su dirigente, Arturo Hernández Cardona, fueron encontrados muertos luego de que habían sido levantados por un comando armado. Sin embargo, hubo sobrevivientes que narraron lo sucedido.
René Bejarano explicó en entrevista con Denise Maerker en Radio Fórmula que en ese entonces uno de los sobrevivientes escribió un documento donde imputaba al presidente municipal, José Luis Abarca, de la muerte de Hernández Cardona.
En el relato se acusó al presidente municipal de decirle (a Hernández Cardona): ´¿qué tanto estás chingando con el fertilizante? Me voy a dar el gusto de matarte'".
De acuerdo con Bejarano, el sobreviviente narró que a lado del alcalde de Iguala estaba el secretario de Seguridad Pública "que es su primo", hoy también prófugo.
"Con ese documento, organismos defensores y el obispo Raúl Vera encabezó un acto en Iguala y se presentó el testimonio por escrito, se hizo el señalamiento en Iguala, ante el Congreso local para promover una acción que consistía en la revocación del mandato, porque no se puede ejercer acción penal mientras no haya desafuero y eso se pidió", dijo.
Bejarano explicó que "el presidente municipal ahora prófugo, era perteneciente a la corriente Nueva Izquierda del PRD y él fue protegido por los diputados locales de la corriente Nueva Izquierda, quienes no quisieron proceder para que avanzara el juicio del desafuero y se ejerciera acción penal".