La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, aseguró que apenas el 0.4 por ciento del total de los concesionarios de taxis fueron quienes realizaron bloqueos y protestas en la Ciudad de México.
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Sin embargo, aseguró que las protestas, que afectaron a los capitalinos, fueron una manera de expresar su inconformidad con las medidas que ha impulsado para acabar con la corrupción en ese medio de transporte y sostuvo que no dará marcha atrás.
"Están enojados porque el gobierno de la ciudad ha realizado una serie de acciones para acabar con la corrupción y grantizar la seguridad y calidad del servicio. Terminamos con el coyotaje a través de la digitalización de la revista y la licencia tipo B", explicó.
Aseguró que estas medidas permitieron cerrar los "históricos centros de corrupción de El Coyol y de La Virgen", también destacó el registro obligatorio de operadores para asociar a cada placa de taxi con cada conductor responsable.
La jefa de Gobierno aseveró que estas medidas buscan modernizar al transporte de pasajeros individual y que el 99.6 por ciento de los taxistas está de acuerdo con su estrategia de movilidad para terminar con la corrupción.
“La ciudad está abierta al diálogo pero que quede claro: el combate a la corrupción no es negociable no volveremos a prácticas opacas que benefician a unos cuantos y que afectan a la mayoría de los taxistas y los usuarios la ciudad quiere taxis derechos y taxis seguros y lo que no quiere es corrupción”, finalizó.
Sobre las movilizaciones de algunos taxistas el día de hoy comparto el siguiente video pic.twitter.com/U7Fid7lby6
— Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) October 8, 2019
EB
