A las 6 de la tarde, una hora con 37 minutos antes de que llegara Américo Villarreal Anaya, candidato de Morena a la gubernatura de Tamaulipas, el terreno en el que realizó su cierre de campaña estaba casi lleno.
Es tarde en Tampico, pero el sol aún tiene la fuerza para generar sed y ganas de refrescarse, es el momento aprovechado por vendedores de agua, refrescos, Bone Ice y heladitos, que hicieron la venta de la semana en algunos minutos.
Apenas pasan de las 6 de la tarde y los carriles de sur a norte de la carretera Tampico-Mante y de la joroba frente a un centro comercial, están saturados: algunas personas van al evento y, otros, van a sus casas después del trabajo.
Los ciudadanos siguen llegando al terreno donde se realiza el cierre regional de campaña, en la colonia Francisco Javier Mina, que está casi lleno mientras esperan bailando música norteña del Grupo Legendario.
Los adultos mayores, con la piel tostada por el sol y apoyándose en banderas guinda como bastón, esperan en primera fila la llegada del candidato, se les nota tranquilos, aplauden, parece que el intenso calor poco les molesta.
Entre las banderas del Partido del Trabajo de color rojo, las blancas de Morena escrito con guinda, que ondean en las alturas, una bebé de tres meses a lo mucho es levantada por los brazos de su papá, que a la vez grita ¡Gobernador! ¡Gobernador!
Fue a las 7:37 de la tarde cuando Américo Villarreal subió al escenario, acompañado de Senadores como Lupita Covarrubias, su esposa María de Villarreal; el diputado Erasmo González; Citlaly Hernández Mora, secretaria general de Morena en Tamaulipas, más Senadores y liderazgos del partido.
La primera acción fue la entrega del “Bastón de mando" al candidato, de manos de integrantes de la comunidad indígena, con una petición expresa de “mejorar la calidad de vida de nuestros hermanos indígenas, gracias señor gobernador".
Tomó el micrófono y entre gritos de ¡Gobernador! ¡gobernador! El Senador con licencia comenzó a hablar con los asistentes al evento, que llenaron dicho espacio de ciudadanos de Altamira, Ciudad Madero, Tampico y Aldama.
Américo Villarreal retomó mensajes previamente expuestos en sus recorridos por los municipios de Tamaulipas en campaña. Recordó pendientes como mejorar la seguridad y garantizar el abasto de agua, hasta dijo, le dará seguimiento a la carretera Tam-Bajío que tanto presume el actual gobierno estatal.
Sin embargo, el mensaje más contundente a los asistentes fue enfocado a lo que esperan en menos de nueve días, durante la jornada electoral del próximo 5 de junio, que fue “salgamos a votar para que no haya mapacherías y marrullerías".
Luego de su discurso, los adultos mayores con playeras blancas y gorras guindas, estaban en el mismo sitio, levantando el puño, animando, gritando pese al calor, al roce con la gente y al intenso sudor de una tarde tampiqueña.
“Es un honor, estar con el doctor", se escuchó a una sola voz, y aunque ya no había sol y la noche había alcanzado al evento, el padre de la pequeña bebé de tres meses seguía levantándola con sus brazos, generando una pintoresca postal entre las banderas.
Luego de la tradicional foto del candidato con los liderazgos de Morena, de espaldas al público para que se vea la afluencia de personas al mitin, vinieron las selfies para presumir en Facebook. La diputada Úrsula Salazar Mojica, sobrina del Presidente Andrés Manuel López Obrador, tardo uno, dos, tres, cuatro o hasta cinco turnos para fotografiarse con el candidato.
La Senadora Lupita Covarrubias no quiso foto, solamente se acercó al candidato y lo sujetó de las manos, para ponerse a bailar una de las cumbias que el candidato tiene como jingle de la campaña a la gubernatura.
Antes de bajar del escenario, Américo Villarreal dijo a los asistentes, “viene un buen grupo, ahí viene lo bueno", haciendo referencia a lo que se avecina para Tamaulipas y refiriéndose a Pesado, que era el espectáculo estelar de su cierre de campaña en Tampico.
Cuando Beto Zapata, vocalista de Pesado, preguntó a los asistentes ¿Qué canción querían? Voces femeninas respondieron “Ojalá que te mueras", uno de sus éxitos más icónicos, pero decidieron mejor cantar “Mi primer amor".
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