La presidenta municipal de Ixmiquilpan, Araceli Beltrán Contreras, afirmó que la paz social en la demarcación es el principal logro de su administración que está por concluir el 4 de septiembre.
Tras recibir un gobierno después de ganar una elección extraordinaria, Beltrán recordó todos los obstáculos a los que se tuvo que enfrentar como la primera presidenta municipal de Ixmiquilpan.
“Nos repusimos de la inundación en 2021, de una pandemia, de la administración de los recursos en un tema de salud, todas las pérdidas, hubo muchos fallecidos que nos pidieron apoyo para gastos funerarios, fue una situación complicada, empezamos como oposición con un gobierno estatal priista que no ayudaba mucho, fueron de las cosas más complicadas, las comunidades estaban a exigir y muchas ocasiones eran utilizados por actores políticos para diferentes cosas”.
Beltrán, quien a sus 38 años planea terminar su gestión como una de las ediles con buena aprobación social, destacó que parte de los logros se deben a que construyó con su equipo de trabajo un gobierno de diálogo, algo que requiere el Valle del Mezquital.
“Fue un factor de cohesión las horas y horas de diálogo, logramos mucha conciliación en la comisión de límites territoriales, varios dictámenes de delimitación política y geográfica, muchos acuerdos de paz donde antes no se podían ni ver comunidades y se firmó un acuerdo de paz, hay muchos delegados jóvenes y comentan que se ha insistido tanto con la paz social y es porque quiero salir y cultivar mi tierra y no salir con miedo de que habrá un enfrentamiento”.
Expresó que el hecho de que haya gobernabilidad se refleja en el turismo, “es un municipio donde pueden ir al centro, disfrutar la gastronomía, comprar artesanías, visitar los balnearios y centros ecoturísticos, y eso ha ayudado que la gente viene y se siente confortable, hemos tenido eventos nacionales e internacionales con saldo blanco y poco a poco hemos logrado ese cambio de conciencia, seguimos siendo un municipio aguerrido, que exige pero también un municipio que quiere un desarrollo”.
Sobre los temas políticos que la aquejaron, donde se le vinculó al grupo político de la familia Charrez, rechazó ser parte de ellos, pues desde que asumió el mandato local se desligó por completo.
“Los hermanos Charrez trabajaron con mi padre, era agricultor, crecieron con mis hermanos mayores, vivieron en casa de mis tíos, existía una amistad con la familia, en 2020 tenía una propuesta laboral fuera del país, pero por la pandemia me quedo en Ixmiquilpan y me invitan a la campaña de Vicente Charrez, posteriormente la impugnan y la coalición me da la oportunidad de representarlos en la extraordinaria y sí, compartí algunos espacios pero se fueron diluyendo porque no compartíamos la misma visión, la forma de ver al municipio, desde la campaña yo dije no voy a prometer cosas que no puedo cumplir, a mi me gusta hablar de frente, lo que sí se puede y lo que no, al no compartir la misma visión que yo quiero gobernabilidad, paz social y un Ixmiquilpan con un nuevo rostro, cada quien tomó su camino y no hay relación”.
Araceli Beltrán es originaria de la comunidad de San Nicolás, fue delegada a los 23 años, estudió en Guadalajara la licenciatura en Comercio Internacional, ha vivido en varios estados y otros países, profesora de yoga y de bienestar físico y espiritual,
“Desde chiquita he buscado ser emprendedora, soy socia fundadora del Rancho La Purísima, fui presidenta de la feria de San Nicolás en 2010, apoyando a horticulores, empecé desde los 18 años, siempre me ha gustado apoyar a la comunidad”.
