Las renuncias al PRI del ex gobernador Omar Fayad, 15 presidentes municipales, regidores, síndicos y ex funcionarios, así como los ocho diputados locales, comenzaron una crisis al interior del tricolor en el estado.
Sin embargo, la nueva dirigencia estatal del partido, encabezada por Marco Mendoza, informó que se fortalecieron lazos de trabajo político con al menos 7 ediles de los que decidieron refrendar su lealtad al PRI.
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Se tratan de Jorge Márquez Alvarado de Tulancingo, José Juan Viggiano de Tepehuacán de Guerrero, María Magdalena Rubio de Jacala de Ledezma, Dante Cárdenas de Santiago Tulantepec, Agustín Ramírez de Agua Blanca, Alfredo Morales de Metztitlán y Fermín Rivera Peralta de Cuautepec de Hinojosa.
Posteriormente, el presidente del CDE PRI Hidalgo se reunió con Jorge Márquez Alvarado de Tulancingo, donde ratificaron su compromiso de atender las causas más sensibles de la sociedad.
A través de las redes sociales del Partido Revolucionario Institucional, se dio a conocer que ambos líderes trabajan para fortalecer la unidad en el partido y así poder hacer frente, juntos, a los desafíos venideros con miras al 2024.
El presidente del PRI Hidalgo calificó a Márquez Alvarado como “un hombre de convicción revolucionaria, y un cuadro destacado del Revolucionario Institucional, que se distingue por honrar la confianza que la ciudadanía depositó sobre él”.
Ambos coincidieron que la fortaleza del partido está en la militancia, ya que ellos día a día caminan, escuchan y conocen, pero sobre todo actúan para promover el cambio y la mejora dentro de la sociedad.
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