Un juez decretó la libertad de una policía de la Secretaría de Secretaría de Seguridad Pública capitalina que junto con su compañero fueron encarcelados tras haber sido acusados de intento de extorsión contra un conductor cuando estaban asignados al programa Conduce Sin Alcohol.
La oficial María Teresa López Arias salió del Centro de Reinserción Social de Santa Marta Acatitla, en Iztapalapa, después de que fue consignada por la Procuraduría General de justicia del Distrito Federal.
El policía José Román Guerrero López, también señalado como presunto responsable de actos de corrupción, continúa en el Reclusorio Preventivo Varonil Oriente en espera de que se defina su situación jurídica, debido que solicitó duplicidad de término constitucional.
El Juez 16 Penal del Reclusorio Oriente decretó este miércoles la libertad de López Arias por no acreditar su culpabilidad en los hechos que se le imputan.
Ambos uniformados fueron detenidos el viernes junto con otros tres policías, en un punto de revisión del alcoholímetro en la delegación Benito Juárez, y fueron consignados dos días después.
El apoderado legal de una empresa los acusó de solicitar dinero a cambio de no llevar al corralón una camioneta, cuyo chofer dio positivo a la prueba de la alcoholemia.
De acuerdo con autoridades de la procuraduría capitalina, aun cuando el conductor fue enviado al Centro de Sanciones Administrativas, conocido como 'El Torito', para cumplir su arresto inconmutable de 21 horas, los policías ofrecieron "darle facilidades" respecto a su camioneta de carga.
Supuestamente el propósito era evitar que el vehículo fuera enviado al corralón, lo que implicaría una sanción económica y la pérdida de horas de productividad para la compañía.
Sin embargo, el denunciante acudió al punto de revisión donde se encontraba detenido el conductor y luego de escuchar la supuesta petición, se dirigió al personal de inspección policial para denunciar los hechos.
De inmediato se ordenó la detención de cinco policías, quienes fueron trasladados a la Fiscalía de Servidores Públicos; tres de ellos obtuvieron su libertad en el Ministerio Público luego pagar una fianza, debido a que el delito de encubrimiento por favorecimiento por el que se les acusó no es considerado grave.