Un menor de un año y 3 meses murió tras presuntamente haberse caído en una cubeta con agua que su mamá utilizó para trapear el piso en una vivienda del municipio de Escobedo, Nuevo León.
Trascendió que la madre del bebé, acudió a una primaria cercana a recoger a otro de sus hijos, pero dentro del inmueble se quedó el pequeño, otro hermano de cuatro años y un adulto mayor en silla de ruedas.
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Sin embargo, al regresar a casa, la mujer se percató de que el niño tenía la cabeza en la tina que habría dejado después de trapear la casa.
La mujer de 24 años, presuntamente pidió auxilio a una vecina quien la ayudó a trasladar al menor hacia una clínica cercana de donde ocurrieron los hechos.
Una vez en la Unidad de Especialidades Médicas de la colonia Alianza Real, Barrio Oaxaca, lo declararon sin vida.
En el sitio se encuentran agentes ministeriales y periciales, así como la unidad Semefo que acudió a retirar el cuerpo para practicarle la autopsia de ley.
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