Cada semana los introductores de ovinos trasladan alrededor de 9 mil ejemplares; sin embargo, eran atracados. Dieron a conocer que en coordinación con seguridad pública municipal y estatal eliminaron la problemática por lo que hasta el momento no han tenido casos al respecto.
Asimismo disminuyeron otro tipo de delitos, por lo que en los primeros ocho meses de 2016, la demarcación bajó 81 lugares en la lista de los municipios mexiquenses con mayores índices delictivos.
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Los asaltos impactaban directamente en quienes se dedican a vender barbacoa en Capulhuac, que cuenta con alrededor de 40 mil habitantes de los cuales 70 por ciento se sustentan de esta actividad.
Se calcula que existe una derrama económica anual de 3 mil millones de pesos que ganan directamente quienes comercializan la carne, pero también los que indirectamente reciben los proveedores de garbanzo, zanahoria, chile, cebolla y otro tipo de verduras que utilizan, sobre todo, que provienen de la Central de Abastos de Tianguistenco y de Michoacán.
Anualmente son adquiridos alrededor de 600 mil ovinos para hacer barbacoa por lo que son vendidos un aproximado de 13 millones 200 mil kilogramos cada 12 meses, si se calcula que por cada ejemplar obtienen entre 22 y 23 kilos.
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Los productores no se concentran en Capulhuac, la mayor parte de las familias, salen principalmente, los fines de semana para comercializar en Hidalgo, Michoacán, Ciudad de México y diferentes regiones del Estado de México.
En colaboración con Coprisem han llevado a cabo revisiones para que los vendedores cumplan con las normas de matanza a fin de que garanticen la inocuidad de los cárnicos, debido a que la mayoría realiza los sacrificios en traspatio por ello es que adecuan el rastro municipal.
RAM
