Mexico se quedará atrapado de nuevo entre las campañas políticas entre demócratas y republicanos. Seremos de nuevo la piñata, de hecho, ya se nos señala de tolerar a los traficantes del fentanilo ilegal y de hacer muy poco contra los grupos de criminales.
También estarán presentes las mentiras o las afirmaciones falsas que con gran cinismo se expresan desde las mañaneras, como la de que “en México se está más seguro que en los Estados Unidos”, cuando no hay un solo dato que confirme eso, y sí que en México tuvimos un promedio de 28.0 homicidios por cada 100 mil habitantes en el 2021, mientras que en los EU fue de 7.8 homicidios; o la otra afirmación falsa, de que “en México no se produce fentanilo”, mientras que las Fuerzas Armadas del país, reportan todos los meses el decomiso de millones de pastillas y ampolletas de fentanilo ilegal y el desmantelamiento de laboratorios.
Ante el poderío que han mostrado los cárteles en México, algunos congresistas estadounidenses han solicitado nombrar a los narcos como terroristas con el propósito de poder confrontarlos ante la insuficiente voluntad del gobierno de México para enfrentarlos. Sin embargo, desde Palacio Nacional con una narrativa populista y retadora, responde que de ninguna manera se va a permitir alguna acción contra los narcos, porque eso sería intervencionismo. Se prefiere solicitar a la comunidad científica de México y EU, que se busque alternativas analgésicas para evitar el fentanilo medicinal, que hoy alivia el dolor de enfermos de cáncer y terminales. Aunque tampoco se sabe de algún esfuerzo para frenar el consumo de fentanilo ilegal y mucho menos una persecución a los distribuidores en la Unión Americana
Para combatir al crimen organizado y los poderosos narcotraficantes, se requiere de una estrategia trasnacional, que congelen sus cuentas, se les persiga legal y se les confronte. Pero eso no va a ocurrir, porque desde la óptica presidencial seria aceptar el fracaso de estrategia de “abrazos no balazos”.
Se avecinan nuevos tiempos difíciles para la compleja relación entre las dos naciones, pero lo será más por las campañas y la distorsionada visión de una buena vecindad.