Antier, en las llamadas tardes de información sobre el covid-19, la directora del Conacyt, María Elena Álvarez-Buylla, señaló que todo estaba muy mal, porque la ciencia neoliberal no había dado resultados, a pesar de que en el sexenio pasado aumentaron los porcentajes de su presupuesto. Todo eso es inteligible para el suscrito, que hizo muchos años ciencia básica y clínica.
El tema neoliberal se refiere a la economía y forma una corriente que ha dirigido a la mayor parte de los países, basada en teorías bien estudiadas y que han dado resultados positivos, combatiendo la pobreza internacional, como se describen en The Economist, y también algunos negativos, como es la acumulación de la riqueza. Pero, ¿la ciencia qué tiene que ver con eso?
Vaya confusión la de querer apoyar al Presidente en todos sus términos, sin entender que la ciencia no tiene que ver con esos conceptos, porque es la única que transforma el medio ambiente a través de observación, investigación, reproducibilidad y resultados, y gracias a ella ahora vivimos cerca de 80 años, en lugar de 40, como en 1940.
Además, la directora del Conacyt debe recordar que la ciencia no tiene fronteras y que las acciones individuales en ese campo están protegidas por las patentes, como premio a la propiedad intelectual. Eso sucede desde hace cientos de años.
Los países, al margen de su sistema económico, que producen más patentes, son: Estados Unidos, con 40 mil; Alemania, con 25 mil; Japón, 21 mil, y China, 6 mil. Mientras, en México concretamos 122 patentes, porque hemos invertido solo el 0.45 del PIB y todo eso al margen de la ideología.
En fin, yo pienso que a esta excelente investigadora tiene que iluminarla el faro de la inteligencia y reconocer que son dos temas distintos y que las grandes investigaciones son internacionales. Estoy seguro que lo comprende, pero la sumisión es enemiga de la ciencia, porque ésta se basa en la realidad y no en la política del poder, sino en la política del saber.
Descartes: Pienso, luego existo… Los avances en la ciencia no tienen que ver nada con el término neoliberal, sino con la libertad de investigación. Qué lástima que un familiar del gran científico Ramón Álvarez-Buylla se exprese así.