Que los representantes de los tres poderes del Estado coincidieron nuevamente en Torreón para firmar un convenio laboral en el que también participan la Universidad Autónoma de Coahuila, la Federación Estatal de Trabajadores, (CTM), la Auditoría Superior del Estado y la Universidad Laboral de México (Unilam). Ahí estuvo el gobernador, flanqueado por otros dos laguneros: los presidentes del Congreso del Estado y del Tribunal Superior de Justicia. Se asegura que entre estos dos quedará la candidatura priista para suceder a Riquelme, pero si se pregunta en otra región del estado, se dice que será Manolo Jiménez, el alcalde, de Saltillo. También había en el estrado, rector lagunero en la persona de Salvador Hernández y hasta dirigente obrero de La Laguna, como es Tereso Medina. Los acompañó el alcalde, Jorge Zermeño, que no parece haber asimilado la derrota del seis de junio.
Que empezó a circular una encuesta, muy tempranera, como para sorprender a Morena, con presuntas preferencias electorales de ciudadanos duranguenses en torno a los posibles sucesores de José Rosas Aispuro Torres, el mandatario estatal. La encuesta, muy a modo del médico José Ramón Enríquez, senador y ex alcalde, lo coloca en el segundo lugar de las preferencias, detrás de Gonzalo Yáñez y a Marina Vitela, la presidenta municipal, de Gómez Palacio en un tercer lugar, para definir la candidatura de Morena al gobierno estatal. Del PAN, Carlos Maturino Manzanares, aparece primero; Javier Castrellón Garza, en segundo y el delfín, dicen, de Rosas, Héctor Flores como tercero. El alcalde de Durango Jorge Salum, está en cuarto lugar. Del PRI, pues los consabidos Esteban Villegas, primero y Enrique Benítez, segundo.
Que la citada encuesta hizo levantar a más de uno la ceja, en señal de incredulidad. En especial, por las cifras de “aceptación” del doctor José Ramón, cuya gestión municipal en Durango fue rechazada por sus propios gobernados, así que mueve a duda que tenga tan buenos números para conseguir la posición morenista. Entre los seguidores de este partido político, la palabra desesperación, se cuela cuando piensan en la encuesta y el doctor José Ramón. Sobre todo cuando señalan que si los candidatos morenistas obtuvieron triunfos en La Laguna de Durango, se debieron a Vitela. Al menos, impaciencia sí hay en Enríquez.