Que ayer circularon por los WhatsApp de propios y extraños, mensajes enviados por José Elías Ganem presumiendo que había salido en la gaceta digital de El Vaticano saludando al Papa Francisco y es que el priista acudió a la Santa Sede a acompañar a su esposa, la titular de los Tribunales de Justicia Municipal, Martha Rodríguez pero no en calidad de funcionaria pública, sino como integrante del colectivo danzante de la Iglesia de la Medalla Milagrosa y cómo no presumirlo, no todos los días se tiene la oportunidad de saludar al sumo pontífice.
Que los envidiosos comenzaron a especular por qué había ido al Vaticano una colectivo “fifi” a danzarle a la Virgen de Guadalupe, que por qué no habían invitado a los “reales” (literalmente) de La Vencedora o de la Pancho Villa, pero la realidad es que las señoras que atendieron la invitación, hicieron su papel y dejaron con la boca abierta a los europeos, quienes no creían lo que veían con los penachos, la tambora, el guaje cuando entraron a la Basílica de San Pedro, donde por cierto, hay un ala dedicada a la Virgen de Guadalupe.
Que Pepe Ganem está que se “cuece” porque llegue 2025 para saber qué le toca en la reelecta administración de Román Alberto Cepeda. Cercanos al Alcalde aseguran que el nombre de Ganem Guerrero ha estado escrito en varias listas y en todas figura como el nuevo Jefe del Gabinete, nada más y nada menos que el “número dos”. Hay que recordar que Pepe estuvo en la “congeladora” por varios años y que por fin está viendo la luz al final del túnel.
Que otro que pudiera ser ratificado en la nueva administración del Alcalde es Luis Morales, ya que ha desempeñado un buen papel al frente de un área sumamente “espinosa”, la Dirección de Vialidad y Movilidad Urbana con la puesta en marcha de operativos y organización en los recientemente inaugurados Sistema Vial Cuatro Caminos y el Giro Independencia.
Que al que seguramente no le va a ir bien es al Comisario César Perales, toda vez que durante el tiempo que estuvo al frente de la Dirección de Seguridad Pública Municipal incrementaron las denuncias por actos indefendibles hacia elementos de la corporación y ni hablar de los asaltos, la escalada de riñas callejeras y la aparición de pandillas en colonias que ya estaban pacificadas, además de que poco le ayudó su equipo cercano que lo alentó a pensar de que se trataba de un monarca y no de un servidor público.
