Que varios legisladores del Partido del Trabajo, encabezados por Reginaldo Sandoval, salieron a dar una conferencia para decir algo que ya se sabía: el Poder Legislativo del Estado de México tiene 180 días naturales para adecuar su Constitución con la federal, luego de la reforma judicial.
En realidad, reforzada con la presencia de Fernando Vilchis, pareció una especie de demostración de músculo político ante el grupo del actual líder de su bancada local, Óscar González Yáñez, quien obviamente estuvo ausente, junto con otros cuatro de los ocho que en total conforman esa fracción. La situación que prevalece al interior del PT sigue echando chispas.
Que hablando de la Legislatura, tuvo eco el llamado de las diputadas que, siendo la mitad de la Cámara local, advirtieron que buscarían presidencias de las comisiones “importantes”. Con sensibilidad, los coordinadores parlamentarios de Morena, PAN, PRI, PT, MC y PVEM han asegurado que las mujeres de sus fracciones tendrán espacios destacados en todas las comisiones, “por su capacidad y el número de curules que tienen”. Buen signo. A ver si entre políticos no se asestan el machetazo a caballo de espadas de las promesas incumplidas.
Que al parecer el partido Morena sí aplicó aquello de la austeridad en la pasado proceso electoral en el estado, pues mientras el resto de los partidos se gastaron todo su financiamiento público, los guindas tendrán que reintegrar a la tesorería del gobierno mexiquense el remanente que le quedó, algo así como 2 millones 515 mil 194 pesos y centavos, de lo que recibió para buscar ayuntamientos y diputaciones locales, que por cierto no fue poco, pues tuvieron disponibles 72 millones 928 mil 429 pesos.
Que la gobernadora Delfina Gómez acudió a recorrer la zona del más reciente desastre ocasionado por las lluvias, en Naucalpan. Dio a la gente el mensaje de que no están solos, y siguió instruyendo que se dé todo el apoyo a los damnificados, pero aprovechó la oportunidad para señalar sutilmente que los gobiernos municipales deben de ayudar a vigilar las zonas que saben claramente que están bajo riesgo de inundaciones y deslaves. A ver si algunos no siguen “distraídos” de la situación preventiva.
