Por Arnoldo Kraus
Ilustración: Kathia Recio
La falta de límites claros entre enfermedad y salud es una de las razones que ha permitido la fabricación de enfermedades. Disease mongering alude a las políticas de la industria farmacéutica que promueven e inventan enfermedades, con frecuencia inofensivas, con el objetivo de incrementar la venta de medicamentos. Para lograr su propósito desarrollan campañas publicitarias. En forma paralela, el incremento en el número y calidad de estudios médicos disponibles y su sobreuso por parte de los doctores coadyuvan a medicalizar a la población. La sociedad, sobre todo la adinerada, se convierte en blanco: consume más, se atiende más y se enferma más, gracias a las farmacéuticas y a internet.
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