Sin duda la anglo-holandesa Shell es una de las empresas globales más interesadas en la apertura energética en México y la reforma constitucional la sorprendió con un director general que conoce perfectamente el medio.
Alberto de la Fuente tiene años en el sector energético. Licenciado en Economía y en Relaciones Internacionales por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), tuvo experiencia en el sector gracias a su paso por la Secretaría de Energía (Sener) y la Comisión Reguladora de Energía (CRE). También trabajó en la Presidencia de la República.
Cuenta con una doble maestría, una en Economía e Historia por la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, y otra en Administración de Empresas en la Australian School of Business en Sidney.
Seis años dentro de Shell le bastaron para asumir la presidencia y dirección general en México. De la Fuente ingresó a la firma como gerente de Mercadotecnia con North West Shelf Gas en Perth, Australia, en 2006. Dos años más tarde fue transferido a Dubai, Emiratos Árabes Unidos, donde se desempeñó como representante y asesor de negocios de Shell en Oman LNG y Qalhat LNG.
Desde que asumió la dirección general en México, en julio de 2012, De la Fuente insistió en que la Reforma Energética fuera profunda y que se dejaran claras las reglas para que fluyeran las inversiones.
Gracias a la apertura, la firma analiza sus opciones en cuanto a la exploración en aguas profundas y en el mercado gasolinero, una vez que se abra en su totalidad en 2017.
