Taiwan Semiconductor Manufacturing Co Ltd, el mayor fabricante de chips por encargo, prevé construir una fábrica de 12 mil millones de dólares en Arizona, lo que supone una supuesta victoria para los esfuerzos de la administración de Donald Trump por arrebatar a China las cadenas de suministro de tecnología global.
El plan, que será una de las mayores inversiones extranjeras en EU y creará más de mil 600 puestos de trabajo, llega en un momento en que el presidente Donald Trump ha intensificado las críticas a las prácticas comerciales chinas y a la gestión del nuevo coronavirus por parte de Pekín, con las elecciones presidenciales del 3 de noviembre en el horizonte.
Trump ha prometido desde hace tiempo traer la fabricación desde el extranjero y la fuerte caída económica provocada por el covid-19 está intensificando la campaña del gobierno para acabar con la dependencia que tiene EU de la producción y la cadena de suministro de China.
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, dijo que el acuerdo era "otra indicación de que la agenda política del presidente Trump ha llevado a un renacimiento de la industria manufacturera estadunidense".
TSMC es un importante proveedor de gigantes tecnológicos estadunidenses como Apple Inc y Qualcomm Inc, así como de empresas chinas como Huawei Technologies, que Washington ha puesto en una lista negra de comercio.
"Este proyecto tiene una importancia crítica y estratégica para un ecosistema de semiconductores estadunidense vibrante y competitivo que permita a las principales empresas estadunidenses fabricar sus productos de semiconductores de vanguardia dentro de Estados Unidos", dijo TSMC.
MRA