General Motors utiliza pequeños retiros para atajar defectos en los vehículos antes de que se conviertan en prolongadas campañas de seguridad que golpearon la reputación de la industria y que pasó factura en las utilidades.
El fabricante estadunidenses, que todavía se tambalea por un retiro masivo de vehículos del año pasado por los interruptores de encendido, recorre las redes sociales y los blogs para detectar posibles problemas con sus coches, lo que le ayuda a identificar problemas cuando afectan a menos de 10 conductores.
GM tiene más de mil personas asignadas a examinar la información, junto con los datos de campo de los distribuidores y los documentos que presenta el regulador estadunidense The National Highway Transport Safety Administration (Nhtsa).
“Tuvimos un mayor número de retiros el año pasado”, dijo a Financial Times Dan Ammann, presidente de GM. “Pero estamos de vuelta de una forma más estable, lo que vemos es un mayor número de retiros, pero cada revisión es en números más pequeños de vehículos. Y la razón para esto es que encontramos los problemas mucho antes”.
“Recientemente realizamos retiros de unos nueve vehículos”, agregó. “Los descubrimos muy pronto, así que no es ‘Dios, vendimos 7 millones de estas cosas y tenemos que traerlas de regreso’, es realmente pronto”.
El año pasado fueron los peores 12 meses del que se tiene registro de retiros de vehículos en EU, los fabricantes emitieron cerca de 800 anuncios que afectaron a 64 millones de vehículos, más del doble que el récord anterior.
Los retiros masivos incluyeron millones de coches que portaban bolsas de aire del proveedor japonés Takata, que en las últimas semanas llegó a un acuerdo con los reguladores estadunidenses para extender el programa a 34 millones de vehículos, lo que lo convertirá en la iniciativa de revisión más grande en la historia de la industria automotriz.
Mark Rosekind, el nuevo director de Nhtsa, dijo que garantizará que no se relaje la presión sobre los fabricantes de automóviles por parte del organismo supervisor de seguridad que anteriormente se percibía como ser demasiado suave con la industria que regula.
Casi la mitad del total de retiros de vehículos en 2014 fueron de GM, con cerca de 27 millones de coches en Estados Unidos, con un costo para la compañía de 4 mil 100 millones de dólares.
Eso incluyó reservar dinero para las reclamaciones de compensación ligadas a coches más antiguos con defectos en el interruptor de encendido que ahora GM acepta provocaron al menos 84 muertes. Los interruptores podían cambiar de la posición “run o en funcionamiento” a “accesory o accesorio” con el coche en movimiento, lo que paraba el motor y no dejaba que se desplegaran las bolsas de aire.
El defecto de encendido llevó a una investigación del Congreso, así como a demandas. Los analistas esperan que la compañía reciba una enorme multa del Departamento de Justicia de EU. La empresa se negó a comentar sobre la posible multa y dijo que seguirá con su cooperación con las autoridades.
Ammann mencionó que el proceso de evaluación de las reclamaciones de compensación ligadas al problema de encendido se completarán en las siguientes semanas.
Agregó que a pesar del hecho de que los coches son cada vez “mucho más complicados”, bajo su nueva directora ejecutiva, Mary Barra, GM busca convertirse en una organización de “cero defectos”.