Ante la desaceleración económica global, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) alertó sobre el aumento que ha registrado la deuda emitida por las empresas en todo el mundo, pues ha alcanzado un nivel de 13 mil millones de dólares, el doble del monto de la deuda registrada antes de la crisis económica de 2008, de la cual poco más de la mitad corresponde a activos con bajo grado de calidad crediticia.
De acuerdo con el documento “Mercados de bonos corporativos en un momento de política monetaria no convencional”, en caso de que se produjera una ralentización de la economía, las empresas más apalancadas tendrían dificultades para hacer frente al pago de la deuda, lo que a su vez podría agravar los efectos de la ralentización, debido a la caída de la inversión y al aumento de las tasas de morosidad.
Así, aunque los principales bancos centrales han cambiado recientemente, el uso de medidas extraordinarias y la futura dirección de la política monetaria seguirá afectando a la dinámica de los mercados de bonos corporativos, aunado a que el volumen bruto de endeudamiento de los gobiernos en los mercados de bonos también va camino de alcanzar un nuevo récord en 2019.
La OCDE explicó que los riesgos y vulnerabilidades de los mercados de deuda corporativa son muy diferentes a los observados durante el ciclo anterior a la crisis, ya que el porcentaje de bonos con grado de inversión de menor calidad es de 54 por ciento, un máximo histórico.
Además, se ha producido una notable reducción de los derechos de los bonistas, lo que podría acentuar los efectos negativos en caso de que se produjeran tensiones en los mercados, por lo que en caso de producirse shocks financieros similares a los de 2008, un total de 500 mil millones de dólares en bonos corporativos irían a parar al mercado de deuda sin grado de inversión en el plazo de un año, lo que conllevaría unas ventas difíciles de asumir para inversores sin grado de inversión.
En este contexto, las empresas de las economías avanzadas, que en 2018 ostentaban 79 por ciento del total de la deuda internacional, han aumentado un 70 por ciento el volumen de bonos corporativos emitidos, al pasar de 5 mil 970 millones de dólares en 2008 a 10 mil 170 millones en 2018.
En los mercados de bonos corporativos de los países emergentes, impulsados principalmente por el crecimiento de China, la deuda total ha aumentado 395 por ciento en la última década, hasta 2 mil 780 millones de dólares en 2018. China ha pasado de presentar un nivel de deuda mínimo antes de la crisis de 2008 a registrar la segunda más alta del mundo.
LVM