Cuna del mariachi y el tequila, el estado de Jalisco se afianza como un polo de innovación en México, de la mano de varias comunidades tecnológicas.
En la entidad, fluye la sangre joven y el afán de emprender, garantías de futuro para conformar el "Silicon Valley mexicano".
El último ejemplo de este empuje fue la celebración el pasado fin de semana, en Guadalajara, del Mexico Drone Festival, el primer festival en el país sobre estos aparatos.
Pero no es el único. Solo en 2015, en Jalisco se han celebrado: el Campus Party México, el Hackatón de periodismo científico e innovación —apoyado por el Banco Interamericano de Desarrollo—, y el Startup Weekend World, además de proyectos tecnológicos impulsados desde el gobierno estatal, como la Ciudad Creativa Digital.
Puntos de vista
"Nos hemos dado cuenta que tenemos la base instalada para hacer grandes cosas y creo que ha sido un acierto el empuje de las comunidades (tecnológicas) como un inicio", dijo Mark Gutiérrez, director de Hackers and Founders México.
Gutiérrez explicó que los emprendedores de esta región ahora quieren trabajar de manera global con nuevas empresas en su lugar de origen, para solucionar problemas de forma innovadora.
"Los emprendedores han comenzado a detectar que pueden competir en este mundo conectado y a hacerlo desde aquí", afirmó Gutiérrez, quien añadió que lo importante es "hacer las cosas de manera diferente y no estar a gusto con el 'statu quo'".
Hackers and Founders apoya a emprendedores que han logrado crear desde drones y probadoras virtuales de maquillaje, hasta un sistema de videoentrevistas para reclutamiento de personal en grandes corporativos.
Y es que todos estos jóvenes han crecido rodeados de empresas electrónicas como Motorola, Kodak, Intel o IBM, que llegaron a Jalisco desde los años de 1980 y generaron la base para el desarrollo tecnológico.
Un verdadero caldo de cultivo para un ejército de ingenieros, diseñadores o desarrolladores ávidos de crear y vender sus propios productos con o sin esas empresas trasnacionales.
Otros proyectos
Meses atrás, líderes de esos colectivos tecnológicos se unieron para formar Meetroopers, una red que busca crear nuevas empresas y fomentar emprendimientos sociales. Entre sus aliados estratégicos están el Gobierno de Jalisco y Google Developer Groups (GDGs) Guadalajara.
Diana Rodríguez, presidenta de Meetroopers, explicó que esta red de comunidades que reúne a aproximadamente 5 mil personas es algo parecido a los “clusters” de las grandes empresas electrónicas, impulsado desde la sociedad civil.
Para Carlos Calderón, fundador de Change Makers, una comunidad universitaria, el emprendimiento social ha tenido éxito porque conjuga la innovación, la empresa y el beneficio para la población.
Estos proyectos se convierten en un agente de cambio no solo para la sociedad sino para los mismos jóvenes, quienes logran "romper esos paradigmas" y "satisfacer las necesidades de las personas" más allá de la retribución económica, indicó.
"Mucha gente no está satisfecha con lo que está haciendo. El emprendimiento es una forma de ir encontrando sentido y de encontrar eso que quieren hacer con sus habilidades, conocimientos y su experiencia", concluyó Calderón, de 22 años de edad.