La tendencia favorable que ha tenido el consumo interno y que ha impulsado a la actividad económica nacional no es sostenible en el mediano plazo y largo plazo, ya que obedece a factores coyunturales, por lo que se tiene que trabajar en elementos que lo mantengan, como la reducción del gasto público, en un monto aproximado de 300 mil millones de pesos, advirtió el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
En conferencia de prensa el presidente del CCE, Juan Pablo Castañón, indicó que las remesas, el efecto en ellas del tipo de cambio, el gasto electoral y el crédito al consumo son elementos que han impulsado el consumo, pero esto no será permanente.
El director del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado, Luis Foncerrada, señaló que los subsidios no han tenido impacto en la reducción de la pobreza ni la desigualdad y, en cambio, se ha reducido la inversión en infraestructura, lo que tiene un efecto muy desfavorable para el futuro del país, por lo que ahí existe un campo importante para racionalizar el gasto público.
“Reducir gasto corriente no afectaría el crecimiento del país y sí tendría un impacto muy importante en la fortaleza de las finanzas públicas, en la percepción de la comunidad financiera internacional y en la percepción del riesgo país”, explicó.
Foncerrada agregó que la cantidad de gasto que habría que reducir para que no se incremente la deuda sería de alrededor de 1.5 por ciento del producto interno bruto (PIB), casi el triple de lo anunciado este año, equivalente a 300 mil millones de pesos.